martes, 21 de diciembre de 2010

Principal de Nota Roja


De más de 100 balazos
acribillan 2 en Zumpango

Antonio Cantú Rendón.—Con ráfagas de rifles de cuernos de chivo y R-15, hombres armados, prácticamente los despedazaron a dos personas, un taquero y otra del sexo femenino en el bulevar de la vecina cabecera municipal de Zumpango de Neri, cuando los ahora occisos se desplazaban a bordo de un vehículo con dirección a Chilpancingo.
Las personas que fueron destrozadas en el interior de su vehículo, era el conocido taquero con razón social «El Sabroso», que se ubica en la colonia Santa Anita de la cabecera municipal de Zumpango de Neri.
El desafortunado taquero, respondía al nombre de Emmanuel López Bernal de 29 años de edad, con domicilio en la parte trasera de las canchas de fútbol de la colonia Los Angeles de Chilpancingo.
Mientras que el copiloto-acompañante Bernardino Cabrera Linares de 50 años de edad, con domicilio en la colonia «20 de Noviembre» de la colonia Santa Anita de la cabecera municipal de Zumpango de Neri.
Cada uno de los occisos presentaba por lo menos 15 impactos de bala, calibre 7.62, del rifle conocido como «Cuerno de Chivo» y 2.23 del rifle R-15, fueron los que utilizaron los presuntos miembros de la delincuencia organizada para acabar con la vida del comerciante y acompañante.
Los hechos ocurrieron hoy martes cuando eran cerca de las 4 de la madrugada, en los momentos en que la pareja supuestamente se dirigían hacia esta capital, a bordo del vehículo de la marca Chevrolet tipo Chevi, con placas de circulación 845-PND del Distrito Federal.
López Bernal circulaba a la mitad de los cuatro carriles del bulevar de Zumpango de Neri, a la altura del hotel con razón social «Captus», cuando presuntos pistoleros a sueldo se desplazaban a bordo de dos camionetas y al ver a sus víctimas se les emparejaron, y una de las unidades se le adelantó al carro en donde viajaban los ahora ejecutados.
Enseguida los presuntos miembros de la delincuencia organizada sacaron a relucir sus rifles AK-47,y y R-15 para luego accionarlas en contra de los ocupantes del carro de la marca chevrolet en más de cien ocasiones.
Al ser rociados de plomo y su acompañante murieron instantáneamente quedando los cuerpos recostados entre ellos, mientras que el vehículo quedó parado a la mitad de los cuatro carriles de bulevar, los supuestos pistoleros al ver que ya habían fallecido sus víctimas se dieron a la fuga hacia Chilpancingo, sin que algún vecino pudiera identificar perfectamente las camionetas de los presuntos sicarios.
Hasta el lugar del crimen llegaron peritos de la Procuraduría General de Justicia del estado, en el ruedo del vehículo en donde se encontraban los ejecutados se contabilizaron más de cien casquillos, en el parabrisas y en la carrocería.
Los cuerpos fueron levantados por personal del Servicio Médico Forense, y posteriormente fueron llevados a la morgue, en donde le practicarán la necropsia de ley, para posteriormente entregados a sus familiares para darles cristiana sepultura.

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