PRIMERA PLANA

Proteste la sociedad por excesos

de la prensa, sea la verdad:JMG

Los medios de comunicación día con día van adquiriendo mayor importancia y generando una transcendental influencia en el ámbito social, afirmó el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia, Jesús Martínez Garnelo.

Al participar ayer martes con una ponencia en la mesa de trabajo de «Estado de Derecho» dentro del marco del Foro «Democracia, Estado de Derecho y Buen Gobierno», en el cual participó con el tema «Trascendencia social de los medios de comunicación en la administración de Justicia».

Destacó que se dice que en la actualidad la sociedad se encuentra regida y manipulada por diferentes medios de comunicación que manifiestan una vida cómoda, sin responsabilidades que empobrecen a la sociedad. Pero también que han jugado, juegan y seguirán jugando un papel fundamental en el desarrollo de la opinión pública.

Martínez Garnelo comentó que basta con mencionar la imprenta, desde que esta fue introducida permitió una mayor difusión de las publicaciones, la gente se tuvo que alfabetizar, y claro con la educación surge el interés por informarse cada vez más. Los medios determinan mucho la manera en que las personas se informan acerca de lo que pasa a su alrededor y esto ayuda a generación de opiniones.

El magistrado presidente destacó que las primeras herramientas para la comunicación masiva fueron la prensa; el surgimiento de la radio dio una amplitud y la televisión llegó a revolucionar los medios de comunicación. Lo más actual han sido las máquinas digitales.

Comentó que tales medios de comunicación han transformado profundamente a la sociedad del siglo pasado y del actual; de tal forma que no es desconocida la enorme influencia que ejercen los medios de comunicación en nuestra sociedad. Añadió, que los medios de comunicación logran generar una actitud positiva frente a un producto y lo convierten en una necesidad; así también pueden crear la objetividad de adquirir un estilo de vida mediante mensajes presentados en forma repetitiva a través de la radio, prensa y televisión.

Reconoció que a través de los medios de comunicación se logra tener un determinado criterio, una determinada opinión, ya sea positiva o negativa respecto de una persona o hechos, dependiendo de la forma en que manejan dichos medios la información.

Son pues, variadas las formas de permeabilidad, de influencia y dominio de dichos medios, dominio que día con día se va acrecentando más y más, sin advertirse desgraciadamente en el futuro un alto al mismo, sino que su poderío se acrecenta como un moustro de mil cabezas, que arrasa y destruye imágenes de personajes al publicar su vida social y privada.

Es indudable que los medios de comunicación social tienen la capacidad para inducir a una reacción social, por ende tienen el poderío para impulsar la tramitación de un juicio a determinada persona o que etiquetan sin importar si la fuente de información es digna de crédito.

El hombre de la toga y el birreto, dijo que lo anterior no puede permitirse en una sociedad democrática, puesto que si bien es cierto, la libertad de expresión es uno de los más altos valores que caracterizan a un estado de Derecho, no menos cierto resulta que esta tiene su límite en la dignidad y respeto del ser humano, pues si se permite la manipulación de información, el país es el principal perjudicado al debilitarse la democracia que tanto nos ha costado alcanzar.

Por ello, alzamos una protesta porque la sociedad ha sido permisiva y carente de la fuerza para evitar los excesos en la tarea de comunicación. Es una vieja querella la de regular su función pero nada se ha hecho; para ello y empecemos pues a analizar el problema con una perspectiva amplia, objetiva y eficaz para lograr el rumbo que deseamos: el de la verdad.

Debido al marco en el que nos encontramos, es el mejor momento también propiciar transparencia en la administración de justicia, y, por tanto, para exigir y promover sistemas de información fáciles de acceder habitualmente, los mismos que a su vez son los que permitirán el monitoreo y fiscalización.

El impulso de una opinión pública capaz de monitorear permanentemente la actuación de las distintas entidades que administren justicia debe de ser un componente imprescindible de toda reforma judicial.

Pero también es cierto que para contar con una opinión pública capaz de monitorear y fiscalizar la administración de justicia en sus distintas modalidades, el rol de los medios de comunicación es fundamental; de ahí la importancia de propiciar a nivel de medios de comunicación y de periodistas la especialización y hasta profesionalización en temas de administración de justicia.

Antes de concluir el magistrado, comentó que el Poder Judicial y la Procuraduría General de Justicia, tendrán que actuar por primera vez sin mucha experiencia en relación a determinadas situaciones, ámbitos y temas; concretamente en casos como persecución de la alta corrupción, graves casos de violaciones a derechos humanos que involucran a las altas autoridades. Es fundamental, pues, hacer un esfuerzo para que los cambios en administración de justicia tengan una dimensión nacional, que comprende todas las zonas del País.