martes, 27 de septiembre de 2011

COLUMNA

El Alacrán

¡ABUSADOS MIS MIL AMORES QUE CHASGO ME DI!

Mucho ojo, mucho ojo, mis estimados paisanos guerrerenses pues a pesar de estar betarro, el pájaro madrugador (satélite) también se para y como burro en primavera este fenómeno es muy visto, es de tener cuatro patas me nace otra pata y por lo arrecho que andaba me fui al paraíso de los borrachos en donde pedí un vaso de leche y el cantinero me dijo óigame aquí no es la lechería, entonces tráigame un Tehuacán con mucho hielo, cuánto debo, le pregunté, él me contestó 25 pesos óigame me esta cobrando el Tehuacán igual que una cerveza pues no se haga usted ahorita se va a reventar el tubo, como que me voy a reventar el tubo que me conoce algo o me habla al tiro, no señor van a salir las chicas a bailar.
En ese momento pasa una dama y rozándome con las nalgas que las tenía duritas, se me levantó la casa de campaña, echándome unos ojazos, me dijo muy sensualmente, ¿me invitas una cerveza chato?, mentalmente, hice cuentas y le pregunté a ¿cómo te las cobran vida mía?, a treinta pesos la ampolleta que pachucas, ni que fuera de opio y ella me contesta no te hagas pendejo esas cuestan mas caras para ese momento el palo que detiene la carpa se parecía al del circo Ataide, y por sentirme muy machín, le dije al cantinero una chela para esta bella dama, no le veía la cara pero eso si me rosaba sus glúteos en medio de mis piernas que tenía abiertas, esta ni tardo ni perezosa puso la boquilla de la cerveza en sus labios y como agua bendita la dejó seca la puso en el mostrador y comenzó a decir invítame otra chato, y volvía a pasarme los glúteos, ahora mas profundos, entre mis piernas que los sentía duritos y paraditos, ya para ese momento de mi cerebro salía humo y el chato llamó al cantinero para pedirle a la chava otra cerveza, ella se puso de frente y comenzó a pasarme sus manos entre mis piernas y muy viva la dama agarró la bandera del circo diciendo, no cabe duda que este es el mes de la patria, la bandera esta a toda asta, ella se volteaba y me volvía a poner sus glúteos duros como todo hombre, la mente se me ponía lujuriosa pensando si así están de duras como se sentirán en la cama entre la música estruendosa y la bailarina exótica, con su baile sensual acariciaba el tubo con sus glúteos se volteaba y tallaba su pelvis sobre el tubo subiendo y bajando frenéticamente, y entre rose de las nalgas de mi invitada y la vista clavada en el tubo moje mis pantalones de engrudo terminó la música estruendosa se prendieron las luces y vi la cara de esta dama la cual se mostraba que tenía como ochenta años y salta patras me separé y sin querer mi mano derecha agarró su glúteo el cual apreté y era puro hule espuma igual que las artistas llamada Jenny Rivera y muchas mas guerrerenses que se creen unas adonis levantando las nalgas y moviéndolas como cual pato del zoochilpan, la chava de ochenta años me detuvo del brazo y me dijo vamos papi te cobro barato y no te fijes en la cara que es lo mismo planchar que desarrugar. Cuánto debo mi querido cantinero, cien pesos con la propina, saque mi billetera, le extendí los cien pesos y agarré la de Juan Diego que bueno que había tomado Tehuacán por que hay otros borrachos que no se la hubieran perdonado a la ancianita, ya tomando el aire del «buldebar», me subí a mi carro y pensé, me esperan en mi casa ahí el trabajo del peluchín no cuesta nada con derecho a leche y servicio toda la noche, sale mas barato. Será esta la vida de los bohemios que tratan de apagar y satisfacer su lujuria sexual, y para que no se quede usted triste resulta que SEMEFO visitó la casa modesta de una señora, la primer pregunta fue señora desde hace cuanto que no ve a su marido, la señora contesta desde hace 2 días salió a tomarse unas cervezas, le pedimos de favor señora si nos puede acompañar a identificar el cuerpo, ella ni tarda ni perezosa y preocupada fue al anfiteatro en donde se encuentran los cadáveres era lunes y estaba atascado de puro estirado destaparon un cadáver y le preguntaron ¿señora este cuerpo es de su marido? Y la señora la vio y dijo no, este no es mi marido, mire señora los vamos a voltear de espaldas a ver si lo identifica, lo voltearon y ella contesta no, no es mi marido. Mire señora por ultima vez lo vamos a voltear de frente y la señora se le queda mirando al pene y les dice a los del SEMEFO bájele el escroto y la señora da un grito HAY!!!!!! Si, si, es mi marido, en dúo los prosectores exclamaron ¡en que lo reconoció señora! y ella contestó «es que mi marido dijo que cuando ya estuviera muerto le pelaban la verga».
Los quiere Cecilio.

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