jueves, 9 de agosto de 2012

POLICRONICA

Ejemplo…Toda una vida entregado al servicio público, casi nadie lo sabe, porque es una persona dedicada a su responsabilidad, discreta, profesional y lo más importante humano, que hace más de un mes recibió la noticia de ascenso de auxiliar a titular de la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común.
Un hombre chaparrito, a pesar de sus ya 75 años de edad, no aparenta tener esa edad, como si apenas llegara a la mitad del siglo de vida. Su historia tal vez es muy amplia, lo único que podemos afirmar ahora que inició sus estudios superiores en la Universidad Autónoma de Puebla (UAP), pero es guerrerense de nacimiento, por ende terminó su carrera en las aulas de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), quien fuera parte del movimiento social de 1960 cuando se demandó la autonomía universitaria y que cayó el entonces represivo gobernador Caballero Aburto. Esta persona se llama Juan Castro Franco, un hombre sencillo, amable, de una estatura baja, pero entregado al ciento por ciento al trabajo honesto dentro de la administración pública. Desde que lo conocemos hace más de 40 años, hasta el día de hoy no le sabemos actos de corrupción, o que se haya visto envuelto en algún escándalo, por el contrario casi nadie sabe que participó en el movimiento de 1960 para lograr la autonomía universitaria, nadie de los que dicen buscar la verdad de aquel tiempo, lo han abordado, nadie le ha solicitado su verdad de los hechos. Juan Castro Franco anda en los 75 años de vida, de los cuales 51 los ha entregado a la administración pública desde los cargos más modestos y hasta el día de hoy, no hemos conocido, al menos públicamente de que haya recibido por lo menos un diploma por su entrega al trabajo oficial. A vuela de pájaro su curriculum es el siguiente: 15 años en el Tribunal Superior de Justicia del estado de Guerrero, haciendo trabajos administrativos, proyectista en la salas civil y penal; dos años, lo que fue la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas del gobierno estatal; cuatro años en la antigua SAHOP del gobierno federal; 8 años en el Registro Nacional de Electores y sus últimos 22 años, como auxiliar de la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común adscrito a las oficinas centrales de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos. Ahí alguna vez tuvimos la oportunidad de saludarlo, platicar seguramente algunas penas personales, porque lo conocemos hace más de 40 años, porque tenía una gran amistad con el profesor Rosalino Melchor Navarrete con quien en vida nos unía como familia, que vivió muchos años en una de las primeras y alejadas colonias populares del centro de Chilpancingo, PRI y al paso del tiempo, fueron compadres. De ahí para acá, solamente sabíamos que era una excelente persona y que había estudiado para licenciado en derecho. Sin embargo el tiempo pasó y no lo habías visto, hasta que una vez lo encontramos parado en la entrada principal de la CODDEHUM, le preguntamos que hacía en ese lugar y contestó que ahí laboraba, equivocadamente creíamos que era empleado de esa dependencia no gubernamental, lo máximo que nos reveló que ahí estaba para servir y atender a las personas, en un reducido cubículo rodeado de muchos voluminosos expedientes. Sin embargo lo seguíamos viendo y platicando brevemente, y hasta este miércoles supimos a ciencia cierta que es un servidor público directamente de la Procuraduría General de Justicia del estado de donde recibe su pago, pero desde hace 22 años adscrito a la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común de la CODDEHUM. Hasta hace un mes le notificaron que estaba ascendido a titular de esa instancia, por consecuencia no hubo mucho movimiento, lo único que cambió fue su cubículo, en lugar de estar entrando a lado derecho, ahora está a la izquierda, sin cambio, porque sigue teniendo muchos expediente voluminosos su alrededor. Sin embargo habría que señalar que este ascenso, fue de los pocos destellos de acierto que tiene la actual Procuradora General de Justicia del estado, Martha Elba Garzón Bernal, que seguramente que al hacer una revisión de su carta de servicio de Juan Castro Franco, constató de su amplia constancia de trabajo. Pero esto no es fortuito, Castro Franco fue compañera de preparatoria de Garzón Bernal, compañera de maestría y compañera de edificio, cuando ella fue visitadora general de la CODDEHUM, ahí lo veía casi a diario. Seguramente cuando llega Garzón Bernal hace más de dos meses a la fiscalía guerrerense, seguro que se acordó que había un licenciado casi perdido en medio de tantos expedientes de denuncias y habría que reconocerle su constancia en el trabajo honesto y ejemplar. Nos parece que es un acierto de esta señora que desde que ha llegado se ha visto envuelta en escándalos que no vienen al caso recordarlos, pero si hay que admitir que le hizo justicia a un hombre entregado a la administración pública sin esperar nada a cambio, pero comprometido con la justicia con los más desvalidos de esta entidad guerrerense inmersa en la marginación y pobreza. Debiera ser ejemplo para muchos servidores públicos surianos, que en verdad si trabaja, que no simulan, si no que desquitan su salario mucho o poco que perciben, como es el caso del licenciado en derecho, Juan Castro Franco. Ahora esperamos que esa justicia que esta haciendo Garzón Bernal, lo haga con otras y otros servidores públicos honestos de la Procuraduría General de Justicia del estado que no descartamos que lo haya a lo largo y ancho de Guerrero y castigue a los deshonestos y corruptos. Debiera ser ejemplo de trabajo para todos esos servidores públicos que se encuentran cobrando un salario que es el pago de los impuestos de los guerrerenses y que pudieran retribuir un poco, con una buena y mejor atención en cada una de las dependencias cuando llegan los ciudadanos buscando una solución a su tramite o en el caso de la fiscalía: justicia y no abuso de poder. Este caso, son de los pocos, que se encuentran en el engranaje gubernamental, y que ojalá el 30 de agosto, cuando se celebra «El Día del Burócrata» le sea reconocido no por sus 22 años de servicio a la procuraduría, sino de sus 51 años en la administración pública, pues casi toda su vida entregada al servicio público….Deshonestidad…Para contrastar este ejemplo honesto de trabajo, con la deshonestidad de 46 diputados locales de todos los partidos políticos, que inmerecidamente y de manera impune buscan sangrar el erario público con mucho cinismo. Ha trascendido que los 46 diputados del PRD, que son mayoría y que controlan la LIX Legislatura se están comportando como unos verdaderos delincuentes de «cuello blanco», secundados por los del PRI, PAN, PT, PMC, PVEM y Panal. Desde hace varias semanas se ha denunciado que estos flojos y sinvergüenzas cuando están exactamente a 33 días de que dejen de tener fuero constitucional al cumplir tres años y ocho meses el 12 de septiembre, ahora están exigiendo el pago de su «sacrificio», cuando habrán de dejar pendientes más de 300 asuntos, entre propuestas de leyes, exhortos y todo su trabajo incompleto. Hasta donde entendemos los diputados son representantes populares, no asalariados, por ende están bien pagados sin trabajar durante ese tiempo perdido, pues la LIX Legislatura es la peor de la historia, secundada por la anterior que también encabezó el PRD y que también fue saqueado el Congreso Local. No solamente los diputados buscan llevarse a sus bolsillos 300 mil pesos de bono, sino también sus flojos disque «trabajadores de confianza» como secretarios técnicos y particulares, obtendrán un «jugoso» bono de «despedida» que van desde los 70 mil y 100 mil pesos, en tanto cada uno de los legisladores 300 mil pesos. Para cubrir estos apetitos económicos, desde ahora nos adelantan que dejarán una deuda superior a los 40 millones de pesos, que poca manera de manejar una institución que se supone tiene que ajustarse al presupuesto anual que ellos mismos se auto autorizaron. Los 46 ladrones del erario, ahora están siendo cuestionados por los mismos trabajadores del Congreso Local cuando a ellos se les ha dejado de pagar bonos, prestaciones e inclusive salarios, que van desde los mil pesos, supuestamente por el Poder Legislativo le faltan recursos económicos. Estos sinvergüenzas durante los tres años y ocho meses su trabajo fue deficiente, fueron únicamente a calentar los asientos, levantar la mano. Lo peor de esta legislatura fue improductiva, practicó hasta el cansancio el ausentismo, tanto que incuantificables veces se suspendieron las sesiones porque nunca completaron el quórum legal, cuando llegaron se fueron a sentar al recinto solo para hablar por teléfono o jugar en la computadora, y ahora quieren que se les premie junto con sus secretarios técnicos y particulares con bonos de 70 mil y 100 mil pesos. Es un insulto para un estado pobre y con este tipo de delincuentes «organizados», la verdad que es criminal, condenable y hasta aberrante saber que no llegan a ese cargo a servir, sino a servirse, pues durante ese tiempo que estuvieron cobrando salarios millonarios, todavía quieren desfondar el presupuesto. La verdad que no hay palabras para describir a estos facinerosos, cuando en Guerrero hay infinidad de familias que no tienen como mantener a sus familias, por falta de oportunidades de un empleo honesto. Los diputados se van, sin haber promovido leyes que generaran empleos, fortalecieran las propuestas para crear modestas empresas para evitar en gran medida que siga creciendo la delincuencia. No solamente los trabajadores del Congreso deben organizarse para protestar, sino el mismo pueblo que paga rigurosamente sus impuestos e impedir ese criminal saqueo que buscan estos flojonazos que en verdad nos indigna, porque no trabajaron, se la pasaron vacacionando como becarios con ese cargo, en donde recibieron salarios mensuales que insultan a la inteligencia de los guerrerenses. Hasta ahora no hay un honesto diputado que diga exactamente cuánto recibe cada mes, nos dan atole con el dedo diciendo que ganan mil pesos diarios, es decir 30 mil pesos mensuales, que ya es un dineral, cosa más falsa, porque extraoficialmente se sabe que van desde los 250 mil y 500 mil pesos, dependiendo como se muevan con sus influencias y su lengua larga. Hasta hoy es un mito saber exactamente como se gastan anualmente el dinero etiquetado en presupuesto anual …Frase… »Este venerable anciano, es mi padre, viene en nombre del virrey, a ofrecerme títulos, donativos, recompensas y dádivas que jamás aceptaré. Respeto y obedezco a mi padre, pero como mexicano de honor, soldado de la libertad de mi pueblo, no puedo traicionar mis ideales, que piensan empañar, los hombres faltos de amor patrio. Su voz, es, para mí sagrada, pero…¡mi patria es primero!.» Vicente Guerrero Saldaña. Libertador de México

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