COLUMNA

 Resquicio Político

Noé Mondragón Norato

¿SISTEMA NACIONAL ANTICORRUPCION, UNA MÁS

 AL RINCON DE LAS BUENAS INTENCIONES?

  A propósito de las elecciones, ¿cuántos exalcaldes llegan con una mano delante y otra atrás?, y después salen millonarios de la humildad a la soberbia, funcionarios que hasta se convierten en empresarios y dueños de constructoras, gobiernos regalando dinero a lucradores sociales, obras mal hechas, un constante desvió de recursos públicos, donde año con año la Auditoria General del Estado, imprime

infinidad de emplazamientos a exalcaldes, ante la falta de comprobación de los recursos manejados durante su administración, sin que exista hasta ahora un exalcalde, extesorero, exdirector de obras y exsíndico, en la cárcel, la AGE de Guerrero ha tenido que poner de patitas en la calle a supervisores que se confabulan con los alcaldes, para ayudar en maquillar las cuentas públicas cuatrimestrales, mientras ello ocurre, los guerrerenses siguen sumidos en la miseria y hasta la extrema pobreza, emigrando a otros estados a la cosecha de jitomate mismo, que ni eso aliviana su precaria vida, en cada entrega de poderes municipales nace un ex edil rico, burlador de la buena fe de los electores, minando el poder de convocatoria para volver a votar, pues lo electores ya no creen, en los constantes discursos de moda, en Febrero de este año el senado de la república aprobó las reformas constitucionales 22, 28, 41, 73, 74, 76, 79, 104, 108, 109, 113, 114, 116 y 122, para dar nacimiento al Sistema Nacional Anticorrupción, que busca frenar el robo al erario público, bajo cuentas maquilladas, y busca según (ahora sí) sancionar a los servidores públicos que hagan mal huso de los recursos públicos, dar mayores facultades a la Auditoría Superior de la Federación (A.S.F.) quien podrá fiscalizar recursos locales, esto se entiende que la Auditoria General del Estado, su trabajo fiscalizador no es apto de buena fe para la federación, por los posibles vínculos de amasiato entre el estado y municipios con la AGE, por ello las reformas constitucionales brincan legalmente las facultades de los auditores estatales, los ciudadanos esperan que esta “buena señal”, no solo quede en una letra de adorno de la misma constitución, como sucede actualmente, ya que el noventa por ciento de los recursos públicos que maneja las entidades federativas, son recursos enviados desde la federación, la declaración del patrimonio y el conflicto de intereses, la ley secundaria debe de revisar constantemente dicha declaración y las posibles denuncias de corrupción, no como acto de querella y/o denuncia, que sea un acto de investigación de oficio, por tratarse de recursos federales que atentan contra el patrimonio y bienes de la Nación, pues es común que en materia de homicidio, la fiscalía estatal que está obligada constitucionalmente a investigar de oficio, se esgrime manifestando que el posible imputado, no se le ha hecho una acusación directa ¡por favor!, ante los hechos de violencia que vive el Estado y la Nación, nadie en su sano juicio, se atrevería a señalar al homicida directamente, es lo mismo en el ámbito de combate a la corrupción, el estado en la ley secundaria que emane del Sistema Nacional Anticorrupción, deberá crear métodos de investigación cuando exista en su escritorio una denuncia por actos indebidos de recurso público, cohecho y corrupción, pues, esperar que el denunciante presente acusación directa y pruebas, de nada servirá entonces el sistema nacional anticorrupción, ya que solo bastaría acudir ante el ministerio público, querellarse, ratificar y ofrecer pruebas, para que la fiscalía, mediante pedimento penal, solicite la correspondiente orden de aprensión del funcionario o ex funcionario público, esperemos que el Sistema Nacional Anticorrupción, aparte de prescribir a los siete años, está también debe de ser del ámbito espacial, ósea pues, aplicable a ex funcionarios antes del nacimiento de esta ley anticorruptiva, que por el momento en letra y buenas intenciones, se oye y se lee interesante, solo falta que no quede como la biblia de muchos, en un librero y en un rincón de la casa empolvada… veremos