lunes, 11 de noviembre de 2019

SEGUNDA PRINCIPAL DE NOTA ROJA

Conmemoraron un año los desplazados,
exigieron seguridad, paz y justicia, hoy
CHICHIHUALCO, GRO.--Coreaaron consignas como “¿Por qué, por qué, por qué nos asesinan si somos personas, personas campesinas?, marcharon las familias desplazadas y demandaron a las autoridades que cumplan el ofrecimiento de seguridad y el repliegue de la policía comunitaria de Tlacotepec para que puedan regresar a sus localidades sin riesgo.
Al cumplir hoy un año en que las familias fueron desplazadas que no han podido regresar a sus localidades de Leonardo Bravo y Zitlala, a causa del crimen organizado, marcharon cerc
a de medio millar en demanda de seguridad, paz y justicia.
Cerca de 500 personas, y fuero encabezados por medio centenar de niños con vestimenta y globos blancos en los que escribieron reclamos de seguridad, paz y justicia.
También los desplazados demandaron a las autoridades que cumplan el ofrecimiento de seguridad y el repliegue de la policía comunitaria de Tlacotepec para que puedan regresar a sus localidades sin riesgo, en tanto los niños desplazados por la violencia demandan regresar a sus hogares.
Durante la marcha corearon consignas como “¿Por qué, por qué, por qué nos asesinan si somos personas, personas campesinas?, y en una de las mantas que porta uno de los contingentes se exige la presentación de tres desaparecidos a partir de la irrupción de los comunitarios en las comunidades de Tres Cruces, municipio de Eduardo Neri, y Campo de Aviación y Polixtepec de Leonardo Bravo.
La marcha comenzó antes del mediodía en la calle principal de Chichihualco hacia el centro, donde los desplazados participarán en una misa, ofrecerán una conferencia de prensa y también está considerado un convivio por la tarde.
En su momento el director del Centro de Morelos, Manuel Olivares Hernández, informó que el convivio es una manera de resistencia debido a que los gobiernos federal y estatal quieren desgastar el movimiento dispersando a las familias.
El defensor de derechos humanos, Manuel Olivares Hernández, quien ha acompañado a las familias desde el éxodo en noviembre de 2018, señaló que hay esperanzas de que las víctimas puedan regresar a sus comunidades.
Las demandas de los pobladores continúan siendo las mismas, que las fuerzas policiales replieguen a los grupos armados que mantienen el control en Leonardo Bravo.
Además que se establezca un cerco de seguridad, para que se garantice la vida de las familias que tengan el objetivo de regresar a sus comunidades.
En el caso de lo desplazados de la comunidad de Tlaltempanapa, en Zitlala, la demanda central es que puedan ser reubicados en otro municipio.
Olivares Hernández refirió que de las mil 850 personas, que abandonaron sus comunidades, sólo el 50 por ciento mantiene el movimiento vivo en Chichihualco, municipio de Leonardo Bravo.
Informó que sólo 82 familias ingresaron un padrón de víctimas, que reciben apoyos para la renta de viviendas y alimentación en Chichihualco.
Después de haber permanecido más de 30 días en un plantón a las afueras de Palacio Nacional en la Ciudad de México, los afectados no descartan regresar a movilizarse, agregó Manuel Olivares.

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