ARTÍCULO

Los valores de
nuestro tiempo

Apolinar Castrejón Marino
¿Y por qué decimos que debemos inculcar los “valores” a los niños y jóvenes? Bueno tal despropósito obedece a la creencia de que “los valores son la base de la sociedad”. Y hasta estamos convencidos de que hay, valores humanos… ¿O morales?
Acudimos a leer un libro de ética de don Eduardo García Maynes, y ahí encontramos sus sabias palabras acerca del conocimiento axiológico, y también nos ilustró acerca de las posturas relativistas, objetivistas y subjetivistas.
Pero nosotros queríamos saber de esos valores a los que se refieren en los discursos: la honestidad, la responsabilidad, la equidad, el amor, la amistad, y tan

tas palabras bonitas.
Así que mejor volvimos a leer el libro de Kevin Dutton, “La sabiduría de los psicópatas”, porque contiene según su prólogo “Todo lo que los asesinos en serie pueden enseñarnos sobre la vida”.
Por ejemplo, Carl Panzram confesó “…asesiné a 21 personas, las ahorqué con mis manos. Estaba tan lleno de odio que no había lugar dentro de mí para sentimientos como el amor, la pena, la ternura, el honor o la decencia”.
Otro sicópata, Ted Bundy, declaraba que: “Nosotros los asesinos seriales estamos en todas partes: somos sus hijos, somos sus esposos, por eso siempre habrá más de mujeres y niños muertos”.
Charles Manson, se burlaba al decir: “Mírame con atención, te verás a ti mismo. Yo soy la proyección de la mentira en que vives, júzgame y senténciame, pero siempre estaré viviendo en ti”.
El punto es, que “los valores” de cada persona, nos tienen en constante amenaza, pueden vernos solo como víctimas, y nos consideran presas para satisfacer sus apetitos. Veamos:
¿Cómo creé usted que lo miran los “políticos”? A decir verdad, solo nos ven como una manada de animales que solo servimos en tiempos electorales, para simular que los “elegimos”. Cuando consiguen sus propósitos de poder, se convierten en deidades, y que no están obligados a cumplir sus palabras, ni sus promesas de campaña.
¿Cómo cree usted que nos ven los empresarios? Pues para ellos solo somos animales de trabajo, siempre están buscando la manera de explotarnos como trabajadores, con salarios raquíticos, mientras ellos se enriquecen exorbitadamente.
¿Y los ministros religiosos? Empezando por el Papa, él seguramente cree que estamos convencidos que es la representación de Dios en la tierra, y que sus palabras son como el mismo verbo de Dios, y sus miradas son como si el altísimo nos estuviera viendo.
A nivel más terrenal, los ladrones, los asesinos y los violadores, están positivamente convencidos de que pueden hacernos víctimas de sus propósitos, con la seguridad de que ni siquiera opondremos ninguna resistencia, ni defensa.
Los niños más grandes de la escuela, agreden y violentan a los menores, basados en su superioridad física y su fuerza, y creen que ese es su “valor”. Los estafadores, nos quitan el dinero y nuestras posesiones con sus argucias, y creen que su habilidad para engañar es “su valor”.
¿Y cuáles serán los “valores” de esos vándalos que alteran nuestra rutina de ciudadanos? Esos que bloquean las calles y carreteras, destruyen edificios, y nos amedrentan con botellas de gasolina, palos y varillas, basan su agresividad en el “valor” de la “justicia” y la “democracia”.
Los funcionarios ladrones, justifican su rapacidad, en su “inteligencia” y “visión”, de haberse unido al partido político, o al candidato “ganador”. “El que no transa. No avanza”, “No´más póngame donde hay”, y “amistad que no se refleja en la nómina, no es amistad”, son los aforismos que resumen los “valores” de la gente en la actualidad.
¿Y los “legisladores” que formulan “leyes” para proteger al medio ambiente? Leyes para no utilizar el plástico y los popotes, leyes para proteger a los caballos, y los toros, y los perros ¿Cómo nos verán?