martes, 14 de febrero de 2012

COLUMNA

El Grillito Sin Censura

Alfonso Cerdenares Domínguez

**Nos hemos percatado de las constantes denuncias en contra del actual alcalde Tixtla… **»Temoltzin» ha caído en el juego de los dimes y diretes de sus detractores… **Por su necedad habrá de enfrentar un juicio penal…

Desde hace unas semanas, con enorme curiosidad, NOS HEMOS PERCATADO DE LAS CONSTANTES DENUNCIAS QUE SE HAN ESCRITO EN CONTRA DEL ACTUAL ALCALDE DEL MUNICIPIO DE TIXTLA DE GUERRERO, JORGE LUIS CAMPOS ESPÍRITU, conocido como «El Temo» o «Temoltzin»; de filiación priísta, Campos Espíritu es de una enorme trayectoria dentro de las filas magisteriales, institucional a más no poder; nosotros lo conocimos cuando impartía clases en la Escuela Secundaria «Heroína de Tixtla», ofreciendo a los estudiantes clases de Ciencias Naturales;
El primer síndico capitalino Antonio Gaspar Beltrán en visita realizada a la comunidad de Petaquillas, municipio de Chilpancingo, donde escuchó de cerca los planteamientos que le hicieran vecinas y vecinos, quienes requerían de su intervención la cual al momento les dio para resolverles.

COLUMNA

Ambición y política


Apolinar Castrejón Marino

Candidatos, candidotes, aspirantes, suspirantes, ilusos, intrusos, obtusos y muchos cientos de «compatriotas», quisieran «pasar a mejor vida», es decir, obtener algún puesto de elección popular, o un hueso de imposición cupular, como les dicen a los cargos «plurinominales».
Empeñados como están en sus sueños, ni siquiera se detienen a considerar si tienen las prendas suficientes para corresponder al compromiso de una representación social.
Según la fauna dedicada a eso que consideran «la política» los únicos méritos que requieren para ser diputete, senador o gobernador, es gozar de la amistad de un perro grande de tal o cual partido «político».
Tal grado de corrupción y perversidad se debe a los gobernantes, específicamente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que hicieron del poder político, un pastel que se repartían entre ellos. Luego vinieron otros partidos a disputarles el poder y salieron tan corruptos como ellos.
Así, tenemos ahora muchas gentes que con total descaro «se apuntan» para incorporarse como parásitos de gobierno.
 Lo notable es que lo hacen como si fuesen unos iluminados, o seres especiales que con solo su nombre y fama los electores se entusiasmarán a votar por ellos.
Muy sonrientes, la segunda síndica María del Socorro Mondragón Sosa, la precandidata a la senaduría Claudia Ruiz Massieu y la presidenta nacional del OMPRI, Diva Gastélum Bajo, mujeres que han servido a las necesidades de sus representados.