Cosmos
Héctor Contreras
Habitantes de los cuatro barrios de Chilpancingo se traían un pleito de aquellos por, como decían los antiguos: quítame estas pajas.
Los celos, o supuestos celos de sentir solamente suyas a las muchachas de cada barrio era, al parecer, el meollo del asunto.
De tal suerte que se cuenta que cuando los muchachos de un barrio iban a otro, los habitantes de ese barrio los apedreaban al visitante, había descalabrados y dicen que hasta muertos.