lunes, 17 de julio de 2017

ARTÍCULO

Los Plomos y las Tinajas
Juan López
En Venecia aún llevan al turista a que conozca los calabozos donde alguna vez piratas incorregibles, asesinos sádicos y ladrones maloras fueron recluidos para que pagaran sus pecados en las peores condiciones de malestar. Son sitios de 3 por 3 metros de lados y altura. El piso es de plomo colado y el techo de láminas y brocado también de plomo. En tales encierros en verano se obtiene un calor de 50 grados a la sombra y en el invierno el frío desciende a los cero grados. Un castigo sin misericordia, no sólo una condena.
Mientras que en San Juan de Ulúa existieron las tinajas. Celdas en

CRONIJUEGO