Nota roja

Médicos le dejan

gasa a una mujer

Agustín Nava Escobar.—Irresponsables médicos del Hospital del Niño y la Madre dejaron desde hace más de un año una «compresa» (gasa de unos 30 centímetros) en el interior del estómago de la señora Angélica Gutiérrez Angel, que ya le había encarnado y es originaria de Mohoneras, municipio de Chilpancingo.

Internada en el hospital privado Santa Fe, hoy jueves pidió el respaldo de La Crónica Vespertino de Chilpancingo para que conocieran de este hecho, y desde el mencionado nosocomio particular donde permanece en la habitación 209, hizo la denuncia pública de los hechos.

Narra que en agosto del año pasado llegó al Hospital del Niño y la Madre donde la tenderían de parto, por lo que la programaron para practicarle una cesárea.

Tocó a los doctores de apellidos Campos, ginecólogo, y el médico Ojendis, quien fue el que cosió la cesárea por donde le sustrajeron a su niña, cerca de las 7:40 horas de la mañana.

Al día siguiente de la práctica de la cesárea, sintió molestias por lo que les dijo a los médicos que sentía demasiado dolor en el abdomen, solo la revisaron al tacto y le dijeron que era por lo mismo.

A poco más de un año de tener la mencionada compresa o gasa, sintió molestias al sentir una bola a un costado del estómago, por lo que acudió a que le hicieran estudios de ultrasonido, lo que reveló que en su interior tenía algo raro.

El estudio reveló que doña Angélica Gutiérrez Angel tenía la referida gasa que le fue sustraída por doctores de este hospital privado desde donde hizo su denuncia y mostró la grande gasa que tiene en un frasco con formol.

La señora quien estuvo acompañada de su esposo Raúl Pérez de 30 años de edad, no descartó la posibilidad de interponer una denuncia penal por negligencia en contra del hospital del Niño y la Madre y de los doctores de los que solo sabe tienen sus apellidos Campos (ginecólogo) y de Ojendis, que fue el que le cosió la cesárea.