martes, 10 de enero de 2012

COLUMNA


Cosmos

Hector Contreras Organista


El famoso y muy querido grupo musical «Koyuka 2000», cubrió con mucho ritmo, elegancia y calidad una de las épocas de oro de la música tropical en México. Desde su cuna, localizada en la región de la Costa Grande, Coyuca de Benítez, en el estado de Guerrero, saltó a la fama para colocarse como uno de los grupos artísticos más queridos en el ámbito nacional en años idos.
Moisés Leonardo García Diego, fue uno de sus fundadores. Nació en el Distrito Federal «pero me crié en la Costa Grande», informó en una entrevista que nos concedió. Los nombres de sus padres son Moisés Leonardo García y Solfina Diego Radilla; su progenitor, originario del DF y su señora madre nació en El Espinalillo, perteneciente al municipio que lleva el nombre de doña Faustina Benítez, esposa de don Juan Álvarez.
El «Koyuka 2000» fue fundado en 1971 por Arnold y Neftalí Méndez. «Ellos son primos míos y me invitaron a participar en su grupo. Ellos ya tocaban y necesitaban un baterista. Yo trabajaba en Acapulco, y fui a integrar con ellos el grupo. Durante tres años estuvimos juntos. Los demás componentes del grupo eran Lamberto Castañeda, como vocalista, con Arnoldo Batáz. Fredy, en el bajo, ‘La Rubia’ en las tumbas y yo tocaba la batería.
«Ensayábamos en la casa de ellos, en Coyuca, en la casa de Filiberto Méndez, el papá de Arnold y Neftalí. El nombre de ‘Koyuka 2000’ se lo puso Arnold. Sustituyó las dos letras ‘c’, de Coyuca y le colocó la ‘k’. Por eso quedó el nombre del grupo como ‘Koyuka 2000’. Después de 1975 nos separamos y nosotros formamos el grupo musical ‘El Auténtico Koyuka’ y ellos siguieron con el ‘Koyuka 2000’. Nos salimos todos, sólo se quedaron los dos hermanos.
«En esa época teníamos unos veinte años de edad, más o menos. Los éxitos del Koyuca eran ‘La Quebrada’, ‘Nubes Negras’, ‘El Burro Solterón’ y grabamos en 1972 y 1973, en la compañía ‘Capitol’. Nuestra música tuvo éxito. Logramos tener contratos en varios lugares, en el DF, Oaxaca y muchos otros donde trabajamos.
«Nos desintegramos porque hubo desavenencias con el papá, que era el representante y ya no nos pusimos de acuerdo. Fue por eso que nos apartamos a hacer el otro grupo que duró unos dos o tres años. Me salí porque me tuve que ir al puerto de Acapulco a trabajar en otro grupo, pero ellos siguieron y ya no supe qué tiempo más. Yo fui a trabajar con ‘Los Bardo de España’, que era un grupo español, también tocando la batería, pero ellos ya hacían show a nivel nacional y tocábamos en los hoteles.
«Después me quedé en Acapulco trabajando en el Grupo ‘Fantasy’, en los hoteles, ahí trabajé como hasta el 89 y de ahí me fui a radicar en 1989 a San Diego, California, donde nos dedicamos a otro trabajo. Son muchos los recuerdos que tengo de esa época, de muy bonitas fiestas: bodas, quince años, no parábamos nunca de trabajar. Ahora que estoy lejos de mi tierra considero que nuestra música guerrerense es única, muy bonita.
«Hace poco me regalaron un disco de Tico Mendoza, con pura música de la Costa Chica, muy bonita. La música guerrerense nunca se olvida. El nombre de mi esposa es María Esther Godoy. Mi hija es Iveth, mis hijos Leonardo y Keven. Tuvimos oportunidad de alternar con Pérez Prado, con Los Socios del Ritmo, en ese tiempo sólo eran el Grupo Caribe, El Acapulco Tropical, que era un grupo muy original, diferente a todos los demás, La Vanguardia Campesina y muchos otros.
«El Koyuka 2000 se distinguió porque era diferente en el ambiente que formaba, en tener dos cantantes, un cantante de música tropical, que era Lamberto y Orlando en lo romántico, abarcábamos los dos géneros. La mejor plaza de nosotros era Chilpancingo, aquí veníamos muy seguid a tocar, en el Jacarandas.
«Nosotros no teníamos como meta hacer fortuna como músicos, sino la satisfacción de tocar y la fama».

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