Resquicio Politico
Hipólito Marbán
EL CONSENTIDO DE DIOS, SU DIOS
Que ciudadano común, que se encuentre en circunstancias de deuda a través de un documento mercantil como el pagaré, donde este en juego su patrimonio y hasta su libertad, desea que un milagro aparezca y Dios (¿que dios?), toque el corazón del juzgador y de un tinterazo absuelva al deudor, pues así le sucedió al arzobispo de Ecatepec Estado de México Onésimo