miércoles, 28 de enero de 2015

El diputado federal  perredista Jorge Salgado Parra visitó anoche la colonia Indeco y fue recibido por el comité de desarrollo y colonos quienes le manifestaron las necesidades que el asentamiento humano tiene, la respuesta que dio “Si llego a la presidencia municipal o no, ustedes tendrán mi apoyo”. (Foto: Teodomiro Ortega de la Cruz).

COLUMNA

Lectura Política

Noé Mondragón Norato

 El caballo negro del PRI
A los políticos hay que leerlos al revés. Cuando dicen que no, es que sí. Y también viceversa. De ahí se entienden muchas actitudes y comportamientos. Posturas que se manejan con reiteración con el único fin de provocar desconcierto y confusión. Acalambrar a los adversarios políticos. Meterles nervio y preocupación. Atizarle al debate público con declaraciones intencionadas. No permitir que su figura sea desplazada de los medios de comunicación. Mantenerse actuantes y operantes. Así como ya está ocurriendo con aquellos que acarician la posibilidad de arribar al gobierno estatal en la elección que lo definirá: la del 7 de junio próximo. Es cuestión de pulsar algunos pasajes del poder local en concreto.
Los vecinos de la colonia  “Margarita Viguri” tomaron el tanque de distribución de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado por la falta del vital liquido. (Foto: Felipe Zurita).

COLUMNA

Resquicio

Hipólito Marbán

LA VERDAD HISTORICA DE MURILLO KARAM: CREA FAMA Y ÉCHATE A DORMIR
 En el sistema penal inquisitivo mixto del Estado Mexicano, se había venido caracterizando con sacar verdades a través de la tortura, mismo que el órgano investigador en la figura del ministerio público, era presentado mediante pedimento como causal del delito solicitando la orden de aprensión en contra del acusado, por muchas décadas y hasta ahora sigue figurando la confesión como la reina de todas las pruebas, pues cuando se confesaba algún delito coaccionado, mediante la tortura, era suficiente para determinar la culpabilidad del inculpado, y sin más trámite, auto de sujeción a proceso, el juicio sumario terminaba oficiosamente en una sentencia condenatoria, la