miércoles, 19 de agosto de 2015


Al comenzar el recorrido, salen desde la casa del padrino para trasladarse a la casa de los novios. Desde un principio la música les acompaña y van bailando, hombres y mujeres. Algunos hombres llevan un guajolote, su lavadero y su botella de mezcal. 
Afuera la banda de chile frito toca el son guerrerense. Las mujeres invitadas bailan y bailan. Los hombres han bailado, entregado los guajolotes, observan el baile y regresan a casa del padrino. El baile regresa de nueva cuenta por las calles principales del pueblo.