Crispín Morales, un ebrio y loco
está por terminar de titular de SAI
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Nicasio de Jesús Chepe
Crispín Morales de la Cruz, indígena mixteco del municipio de San Luis Acatlán, sin ser militante del PRD, en unos días está por concluir sus funciones como Secretario de Asuntos Indígenas (SAI) del Gobierno del estado y de lo que se sabe de él, es que su único mérito para ocupar el puesto durante seis años, es ser un locochón y un ebrio consuetudinario, amigo del ex alcalde perredista del municipio de Alcozauca Javier Manzano Salazar.
En el año del 2003, era el auge de Javier Manzano Salazar, quien culminaba su mandato en su segundo periodo constitucional del municipio de Alcozauca, cuestionado y sancionado por el Gobierno de René Juárez Cisneros y el Congreso del estado, al parecer por desviar dinero del municipio mencionado, todo porque daba apoyos a otros municipios y no podía comprobar los recursos. Incluso la terquedad de Javier Manzano Salazar, cuyo objetivo era ganar la simpatía de los ciudadanos de Tlapa, construyó el puente del Otate y la apertura de la carretera, vía corta tramo Tlapa-Alcozauca, que sólo beneficiaba a dos pueblos. El primero es el Otate y el segundo es Totomochapa, por lo que su ejecución no era tan redituable en cuanto al beneficio de muchos habitantes. Sin embargo, políticamente si era redituable a favor de Javier Manzano Salazar, ya que en las elecciones federales del 2003, se echó a la bolsa a sus paisanos alcozauquenses, que ya no darían vuelta hasta Tlalixtaquilla y la luz de Juárez para llegar a la cabecera municipal, ya que con la carretera de la vía corta, sin pavimentarla todavía se hacían menos de dos horas. Entre esas osadías del propio Javier Manzano Salazar, posibilitó con mayor facilidad buscar la Diputación Federal del Quinto Distrito con cabecera en esta ciudad de Tlapa, quien ganó la elección ante un débil candidato del PRI que representó Javier Jiménez Vázquez. Ya estando como legislador federal Javier Manzano Salazar, se sumó a la precampaña y campaña político electoral de su entonces compañero diputado Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, es por eso que en la montaña tuvo fuerte presencia aunado a ello a los grupos radicales del perredismo quienes defendían y lo ponían como ejemplo el Gobierno de Acapulco que encabezó. Concluida la campaña y el triunfo electoral de Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, este ya como gobernador electo en una platica que tuvo después de las elecciones le ofreció a su entonces amigo diputado Javier Manzano Salazar, la Secretaría de Asuntos Indígenas (SAI) y este que le estaba sabiendo las mieles que da la Comisión de Asuntos Indígenas del Congreso de la Unión que estaba como Presidente, después de entrevistarse con el Gobernador electo Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, volvió a esta ciudad de Tlapa, cuya propuesta le comentó a su compadre Manuel Rosas Torres, trabajador del Centro Coordinador Indigenista de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos (CDI) que como le haría para cubrir el puesto que le permitiera terminar como diputado y regresar a Guerrero para ocupar la Secretaría de Asuntos Indígenas (SAI), cuyo compadre, de inmediato se acordó de su jefe y amigo, con quienes en varias ocasiones se habían emborrachado con él. Manuel Rosas, le dice a su compadre que no pensara mucho en quien podría jugar el papel de mientras terminaba la diputación. “Compadre no te hagas bolas. Ahí está el loco y borracho de Crispín. Es buen amigo y ya ves que conoce hasta de armas”, sin reflexionar más. Javier Manzano Salazar, de inmediato aceptó la propuesta y le presentó a Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, el nombre de Crispín Morales de la Cruz, para el cargo de la Secretaría de Asuntos Indígenas (SAI), quien fue aceptado.