No desarmarán comunitarios de
Xaltianguis, les darán camionetas
Javier Francisco Reyes.—No desarmar a la Policía Comunitaria y dotarles de tres camionetas para que haga sus rondines en la comunidad de Xaltianguis, municipio de Acapulco, acuerdo arribado entre el gobernador perredista Angel Heladio Aguirre Rivero.
La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, conoció la mañana de hoy viernes que en ese encuentro anoche en la residencia oficial con los representantes de los habitantes que bloquearon por 24 horas—miércoles y jueves--la carretera federal Chilpancingo-Acapulco, a la altura de Xaltianguis.
El jefe del ejecutivo estatal se comprometió a dialogar con los mandos militares para que éstos respeten las actividades de las guardias comunitarias, que decidieron encarar a la delincuencia después de la indolencia oficial.
Otro de los acuerdos arribados, fue que sostendrá una audiencia entre pobladores y el alcalde de Acapulco, Luis Walton Aburto, al que le presentarán un pliego de demandas.
Además se acordó que el próximo martes se realizará una reunión en este poblado para dar seguimiento a los acuerdos alcanzados anoche en la residencia oficial de “Casa Guerrero”.
Ante de llegar al encuentro, ayer jueves por la mañana al cumplirse 24 horas, liberaron la vía federal, replegándose hasta que llegaran los resultados tanto de las negociones con el gobierno federal y estatal, al exigir que se retire el Ejército Mexicano de Xaltianguis.
En las negociaciones, entre otros estuvieron Jaime Martínez Veloz, comisionado nacional para el Diálogo con los Pueblos Indígenas y los pobladores de Xaltianguis quienes exigen respeto y permanencia de la guardia comunitaria conformada el 15 de junio del presente año.
También se acordó que el alcalde porteño Luis Walton Aburto convoque a una sesión de cabildo abierto en este poblado, así como la puesta en marcha de proyectos productivos en la zona para abatir la pobreza y generar desarrollo.
También reprocharon la actitud del comandante de la 27 Zona Militar, Mario Lucio González Cortés, quien habría sentenciado de que desarmaría al grupo de autodefensa y consignaría a sus dirigentes pues, incluso advirtió que el Ejército jamás se va a coordinar con civiles armados que se encuentran fuera de la ley.
La presencia militar en Xaltianguis comenzó a registrarse al momento que surgió el grupo de autodefensa y que después se sumaron a la Unión de Pueblos y Organizaciones del estado de Guerrero (UPOEG).
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