martes, 14 de marzo de 2017




POLICRÓNICA



  Adorno...¡¡Paren las masacres!!, es el grito desesperado de  miles de ciudadanos que ahora les tocó vivir en el “Corredor de la Muerte” de la zona centro de Guerrero, en donde supuestamente está blindado por el adorno de 600 militares y más de 150 policías de la “Fuerza Estatal” y en sus narices tres grupos delincuenciales se disputan el control territorial, y lo “extraño”, que el gobernador priista, no ordena su detención como lo hizo con “El Tequilero”.