La descortesía le salió a relucir a Marco Antonio Leyva Mena hasta que un vecino del barrio vestido de camisa color rosa lo invitó a que saludara a los parroquianos, y como no sabían de quien se trataba, el popular Pañañas le hacía fiesta al futuro presidente municipal de Chilpancingo.
lunes, 15 de junio de 2015
Primero los borrachitos del barrio de San Antonio llegaron sedientos y como observaron que los festivos feligreses pusieron un palo encebado y que había unas botellas hasta la punta, se las ingeniaron haciendo una pirámide, con mucho esfuerzo por la cruda que traían lograron obtener el preciado regalo y cuando ya las tuvieron tardaron más en bajarlas que ellos en beber su contenido, “salud, salud” y terminaron cuetes hasta con toritos pirotécnicos.(Fotos:Domingo Francisco Reyes/Leer PoliCrónica).
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