Crónicas de Amor
Felipe Zurita
Contraluz
Las mañana se vuelven hermosas
inquietantes para el alma
es como volver a estar enamorado
y es que el corazón se vuelve loco.
Y vuelvo a ser el mismo hombre
de hace muchos años
Tímido, nervioso, retraído, inquieto
y porque no..? Un púbero loco.
Me gusta mirarte, disfrutar tu andar
y hacer que mi vida regrese amar
con todo aquello que da la juventud
incluso la timidez que te lleva al silencio.
Hace muchos años que no sentía la pasión
esa energía que proporcionas a mi corazón
y que me hace estar ahí mudo, mirándote
saber que pasaras a mi lado y admirarte.
No sé si lo sabes. Pero te amo.
Y me gusta mi silencio porque te admiro
estoy perdido frente a ti. Me vuelvo viento
buscando tus ojos para llenándome de ti.
Eres la gota de miel de mis amaneceres
me gusta mirarte en silencio
decirte tantas cosas en silencio
que prefiero no perder de vista tu ser.
Me encanta la figura de tu cuerpo
el andar de tus caderas y el juego
que haces con tu cabello azabache
en tu rítmico andar por el aire.
No sé ni tu nombre. Pero que importa
si eres la mujer bonita de mi alma
esa que tanto posee mis deseos
que roba la cerrazón y el tiempo.
Estaré ahí cada mañana, cada amanecer
esperando el brillo de tu andar
la forma linda de saltar al caminar
entre puntillas agitando este silencio.
No hay forma más sublime para amar
que el silencio, convertido en una sombra
algún día lo veras, será cuando tus ojos
volteen a contraluz del sol y me miraras.
