Lectura Política
Noé Mondragón Norato
Sucesiones gubernamentales sangrientas o la mano que mece la cuna
La víspera de las tres últimas sucesiones gubernamentales en Guerrero, han estado marcadas por el calentamiento político a su más alto nivel, del ring electoral. Y la sangre y la muerte aparecieron como factores inherentes a las despiadadas emboscadas políticas. Es obvio que hay fuertes intereses de poder escondidos tras esos terroríficos acontecimientos. Pero las autoridades investigan lo que ocurre en la superficie, nunca lo que subyace en el fondo. Los autores intelectuales camuflados dentro del poder público como inofensivos personajes, sencillamente no caen. Ni se abre investigación alguna en su contra. Aunque en secreto y en las conversaciones en corto, el común de los ciudadanos intuyan, de quién o quiénes se trata. Y como no hay investigación ni castigo, se fomenta en consecuencia, la redición puntual del fenómeno. Enquistándose la impunidad y los excesos. Esos personajes son metafóricamente, la mano que mece la cuna. Nadie los puede ver ni tocar. Literalmente, son entelequias políticas que dejan su rastro de sangre. Los hechos son tercos.