La calle 21 de marzo de esta capital donde se encuentran las dos centrales de autobuses, se encuentra en pésimas condiciones, urge que el gobierno municipal perredista del cambio que encabeza Gaspeor mande a repararla, ofrece más aspecto de imagen para los propios y extraños que arriban por esas terminales.
Frente a la Iglesia de San Francisco en la esquina de las calles Juan Ruiz de Alarcón y Pedro Ascencio de Chilpancingo, se encuentra una persona vendedora que está obstruyendo el paso libre a los transeúntes ojalá que el director de gobernación municipal vaya y la remueva.
Cuando fue presidente municipal de Chilpancingo, el priista, Mario Moreno Arcos, construyó el parque recreativo “Unidos por Guerrero” del fraccionamiento del mismo nombre, y colocó juegos de madera para los infantes, arribó su colega tricolor, Marco Antonio Leyva Mena, nunca se preocupó por darles mantenimiento y ahora que llegó como alcalde perredista, Antonio Gaspar Beltrán, tampoco se ha preocupado por modernizarlo, pese a que están a punto de caerse la maderas, brilla por su ausencia del Gobierno de la Gente y del Cambio.
El Gobierno de la Gente y del Cambio que encabeza, Antonio Gaspar Beltrán, le importa más el dinero, que poner orden y seguridad para los ciudadanos, al permitir que en pleno zócalo los comerciantes que vendan frituras y utilicen cilindros de gas doméstico LP de 20 kilos, convirtiéndose permanentemente en una verdadera bomba de tiempo.
