Matate
Crónica de Amor
Felipe Zurita
No hay tiempo para respirar
el silencio carcome al amor
y la luz del cielo lo devora
en la oscuridad del temor.
Sobre la cama, la tentación
y en la mesa del almorzar
razones que atan al corazón
en su dulce silencio sin titubeo.
Sirve acaso un amor con dudas
cuando el aire lo vuelve denso
y respirar es un dulce venado
es ahí cuando todo termina.
El amor sufre y muere su derrota
cayendo de rodillas en el profundo
letargo de los días sin noches
de los soles oscuros y del amor
dilapidado en dudas de silencio.
Si hoy quieres morir por amor
Matate. Matate para que el infiel
se vuelva carne de lamento
y sus días eternos de placidez.
o solo desvanécete para convertirte
en sombra del silencio quien busca
morirse de amor y no en tempestad.
Vale más un mal arreglo 
