PRIMERA PLANA

Por irresponsabilidad

oficial deja 2 muertos

Texto y foto:Jorge Luís Falcón Arévalo.ATOYAC, GRO.- En una competencia considerada como deporte extremo por especialistas y que durante más de diez años estuvo vetada por exponer la vida de los competidores; éste fin de semana cobró dos victimas productos de una mala organización y una irresponsable estrategia de brindar seguridad y protección a los contendientes, por parte de la autoridad gubernamental organizadora del evento. Sin embarcaciones que pudieran auxiliarles en caso de auxilio; y, sin el equipo necesario e indispensable para este deporte, los elementos de Protección Civil, nada pudieron hacer, -pese a su disposición- para rescatar con vida a los fraternos; así como a otros que sufrieron heridas en esta justa.

Los hermanos Aurelio y Santiago Solís Barrientos de 38 y 47 años respectivamente, al aventase en el vaso de la presa -hecho que históricamente nunca debe hacerse por el remolino natral que conforma la corriente y atrapa todo lo que esté cercano- el cual debió ser señalado; pero también contar con las indicaciones requeridas, según manifiestan familiares de los competidores, que fueron retirándose de la competencia, porque muchos estuvieron a punto de morir ahogados. Al no considerar las fuertes y constantes lluvias que han azotado la parte alta de la sierra, acarreando con ello, una movilización de agua que arrastra todo a su paso.

Desde en la mañana del sábado en la Presa del río, desde donde confluyeron competidores, familiares de éstos y escasos elementos de seguridad, emprendieron la odisea fatal los 42 contrincantes de la carrera, que se dio eran parte del festejo del Bicentenaro; en cámaras de llanta que al decir de conocedores por varios años había dejado de llevarse a cabo por los innumerables accidentes y muertes que allí se habían suscitado en estas fechas. Inclusive el mal gobierno del imprudente ex presidente municipal Pedro Brito García, suspendió éste evento por considerarlo peligroso para los participantes.

Al decir de familiares y amigos, la competencia debió haberse suspendido por el mal tiempo y por no contar con los equipos de salvamento y protección necesarios primero para los elementos de Protección Civil -que sino son albañiles un día; y al otro, son estibadores; pero siempre fieles a su trabajo, del cual el Gral. Juan Heriberto Salinas Altés, esta recabando datos y la información para verificar las acciones de estos intrépidos trabajadores en Atoyac- y posteriormente disponer de embarcaciones acuáticas dispuestas en diversos puntos donde las rocas y troncos de árboles son factores de fatalidad para cualquier arriesgado.

Se enlutan hoy dos hogares de personas ampliamente conocidas, esto debido a una irresponsable actitud del gobierno municipal; pero además por no contar con el aval requerido por los especialistas de deportes extremos, que en estos casos, debió haberse hecho; pero ante la actitud baladí e insensata de la administración municipal, cobró dos vidas.

Mientras esto ocurría, habitantes de la parte alta de la sierra, demandaban ayuda al gobierno ausente de Armando Bello Gómez, el apoyo requerido, porque las aguas del Huracán «Karl», afectaba sus casa y los caminos, haciéndole imposible el transitar hacia esta cafetalera ciudad.