El avispero Apolinar Castrejón Marino Según algunos “cronistas”, Chilpancingo significa lugar de las avispas, pero la gente no cree tal versión, primero, porque esos “tinterillos” se caracterizan más por estar pegados a la ubre del gobierno en turno, que por la veracidad de sus investigaciones. Pero tenemos que admitir que ese sobrenombre le queda muy adecuado a la Ciudad Capital del Estado de Guerrero, en vista de los acontecimientos violentos, y el clima de inseguridad del que nadie está a salvo. El fallido gobierno de Ángel Aguirre sacudió demasiado fuerte el árbol de la vida en el que se cobijan los políticos de nuestro estado, y en una de esas se agitó demasiado el panal de la miel, y se alborotaron las avispas, especie muy agresiva y numerosa, y por ende, mortal.