La ecología y las mentiras Apolinar Castrejón Marino Muchos animalitos sirven como mascotas: perros, pájaros y gatos. Algunos menos afortunados son utilizados como juguetes: perritos, tortuguitas y ratones blancos. Resulta común que las gentes tengan mascotas en sus casas, y que les den atenciones y cuidados. Pero hay una línea muy delgada entre los humanos con mascotas, y los dementes que dan a los animalitos, la categoría de seres racionales, como si fuesen personas. Las gentes sin familia, que viven, comen y duermen con su perro o su gato, como si fueran de su familia, tienen algo mal en su cabeza. Hay quienes declaran sin rubor, que se llevan mejor con su mascota que con su pareja, y se vanaglorian de los «sentimientos» superiores de su mascota, son candidatos al manicomio.