La regla de la mayoría Apolinar Castrejón Marino Simón Bolívar dijo de manera categórica: “Si mi muerte contribuye a que los partidos políticos cesen sus hostilidades, y la unión se consolide en beneficio del país, yo bajaré tranquilo al sepulcro”. Pero, en una democracia, la unanimidad no es posible. ¡Bueno!, ni siquiera es deseable. ¿Entonces? La regla de la mayoría es utilizada por sistemas democráticos para tomar decisiones cruciales en beneficio de la colectividad, pero también los sistemas no democráticos utilizan una falsa mayoría, preparada con la complicidad de falsos líderes, y con procesos de participación ciudadana fraudulentos. Desde la antigüedad, hubo procesos de toma de decisiones. Platón describe en su libro “Diálogos”, que cuando el estado va a comprar caballos, es necesario pedir la opinión del ganadero, o del montador; cuando se va a comprar una embarcación, se busca la opinión del constructor o del navegante; pero cuando se va a construir un puente o ...