COLUMNA

El Grillito Sin Censuras

Alfonso Cerdenares Domínguez

 -.Los que no se pueden embarazar dicen “No al aborto” -.El aborto existe, pese a quien le pese-.El crimen del Padre Amaro” se quedó corto 

Los que no se pueden embarazar, son los que andan con su alharaca, con su cacaraqueo de no despenalizar el aborto; nosotros recordamos cómo, hace un tiempo, gente insensata andaba recabando firmas en los sitios donde había concentraciones masivas; fue en una de tantas que se nos acercó un tipo, con la sonrisa

maliciosa y con una cara que no podía ocultar lo corrupto que era; entonces nos invitó a que firmáramos para que eso del aborto se convirtiera en un delito para mandar a la cárcel, tanto a quien lo practicara como a la presunta mala madre; nuestra respuesta fue contundente: “primero te embarazas y luego, con todo gusto, te firmo”; el tipo aquel se quedó atónito, pero aun así pregunto: “¿por qué?”, a lo que respondimos que nosotros los hombres no teníamos nada que opinar en torno a lo que las mujeres decidieran sobre su cuerpo; “supongamos que te violaran”, le dije dándole pequeños empujoncitos en el cuerpo, “¿tendrías un hijo de tu nefasto violador?”; turbado, aquel individuo, moviendo la cabeza negativamente se alejó definitivamente del grupo en el que nos encontrábamos; así es, si esos curas retrógradas y reaccionarios fueran violados y embarazados por un pelafustán, seguramente estarían felices de tener un hijo, producto de un abuso sexual; son ellos los que, a decir de la información que se ha difundido en los diferentes medios de comunicación, los que han abusado de sus hábitos para aprovecharse de las mujeres de las comunidades y de los barrios; esos que han sido acusados, denunciados de ser unos consumados pederastas y que ahora se desgarran las vestiduras buscando defender lo indefendible, gritando a los cuatro vientos: ¡¡¡No al aborto!!!; EL ABORTO EXISTE, PESE A QUIEN LE PESE y si se despenaliza, habrá menos muertes por este tipo de hechos clandestinos; estamos de acuerdo: todos tenemos derecho a la vida, pero también la mujer tiene derecho supremo para decidir sobre su cuerpo; ahora sí que los inútiles legisladores deben de echarle mucho “seso” para no cometer otra tontería más; la cosa es sencilla: Que sea la mujer la que decida sobre su organismo, sobre su cuerpo y no gente malintencionada que no tiene vergüenza al meterse con sus “feligresas”; entonces no vociferan por el “No al Aborto”, pues ruegan que de verdad Dios exista y los saque del atolladero en que los meten sus insanos instintos sexuales; indudablemente, la película de “EL CRIMEN DEL PADRE AMARO” SE QUEDÓ CORTA en cuanto a las cuestiones de la iglesia y las necesidades fisiológicas; en ese aspecto, los entendemos, pues son seres humanos como todos nosotros, solamente que ellos, al ordenarse sacerdotes, ofrecen voto de castidad, cosa que muy pocos llegan a cumplir, veremos qué pasa con este controvertido caso; si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: alfcerdenaresd@hotmail.com