miércoles, 30 de agosto de 2017

COLUMNA

Sin Concesiones
Armando Patrón
*** Fracaso escandaloso de Leyva Mena
Para entender el escandaloso fracaso del priismo en esta ciudad, podemos señalar que cuando el actual alcalde de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena se disponía a contender por la alcaldía de la capital, ocupaba el segundo lugar de las encuestas con un 15 por ciento, mientras que el actual diputado local Ricardo Moreno Arcos, tenía un 56 por ciento, y Heriberto Huicochea Vázquez un siete por ciento, muy alejado de la competencia.
Pero el actual gobernador, Héctor Antonio Astudillo Flores, que se preparaba para competir por ese cargo, deseaba por un lado deshacerse del liderazgo de Los Moreno, por lo
que haciendo uso de sus perversas habilidades, logró que Ricardo Moreno Arcos se fuese de diputado local plurinominal, y convenció también a Mario Moreno de que si llegaba a ocupar la gubernatura, él sería el próximo dirigente estatal del PRI. El gobernador cumplió a medias. Engañó a Mario Moreno Arcos, a quien le otorgó de consolación la delegación del ISSSTE.
El ganón de toda esta estrategia perversa fue el diputado local plurinominal en ese entonces,  y l actual alcalde de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena, quien apenas pudo vencer por unos cuantos votos al abanderado del PRD Antonio Gaspar Beltrán.
Y resultó elegido porque el gobernador del estado Héctor Antonio Astudillo Flores, necesitaba urgentemente a una persona leal quien le cubriera el enorme desfalco de cien millones de pesos del cual estaba acusado al término de su mandato.
El 25 de julio del 2016, el subsecretario de egresos de la Secretaría de Finanzas del Gobierno del Estado, Tulio Samuel Pérez Calvo, informaba a la opinión pública que se tenía  un adeudo de más de 100 millones de pesos con empresas aseguradoras, “a las cuales debieron haber transferido recursos que descontaron del sueldo de los trabajadores, por la contratación de servicios y créditos”.
A esto se debe el fracaso de Marco Antonio Leyva Mena, a la impunidad que avizora en todo momento, por ello se está llenando el bolsillo de dinero de los contribuyentes, por ello nadie lo llama a  cuentas, por eso pretende seguir con su aumento de impuestos. Primero aumento la tarifa de agua potable, ahora pretende un cobro por recolección de basura. Y es que si es presionado o amenazado con ser destituido puede dar a conocer el destino de los cien millones de pesos.
No existe obra alguna en la capital de Chilpancingo. Se equivocó con la obra en la Avenida Alemán porque no beneficia a nadie, más que a él por haber recibido el diezmo. No existen obras en la capital más que las que ha inaugurado el gobernador del estado, Astudillo Flores, quien es el principal responsable del desastre de la actual administración. Son millones y millones de pesos que se están yendo al bolsillo de unos cuantos funcionarios, principalmente el alcalde.
No existe un gobierno en Chilpancingo, sino un vacío de poder, por culpa de irresponsables, sátrapas y ladrones que se reparten el botín sin importarle el bienestar de la gente. Por ello el 2018 será la oportunidad de la ciudadanía de mandarlos al diablo.

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