martes, 31 de julio de 2018

POLICRÓNICA

Confrontación…Entre el Secretario de Seguridad Pública estatal, Pedro Almazán Cervantes y el municipal de Chilpancingo, Paulino Molina López, tienen una fuerte confrontación, por ello hay una descoordinación en el tema de seguridad y lo aprovecha la delincuencia organizada para cometer desmanes con total impunidad.

Las razones de fondo se desconocen de la  confrontación entre el titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno estatal, Pedro Almazán Cervantes y el secretario de seguridad pública municipal de Chilpancingo, Paulino Molina López, este último nombrado en abril por el presidente municipal suplente, Jesús Tejeda Vargas avalado por el Cabildo plural y con el retorno del propietario, Marco Antonio Leyva Mena sigue en el cargo el jefe policiaco local. Esta evidencia la revelan los recién liberados 120 policías a finales del mes de junio, tras seis meses de estar acuartelados por una supuesta investigación de parte de la Fiscalía General del estado, por la presunta participación de algunos integrantes en la desaparición de 7 jóvenes en el mes de diciembre del 2017. La versión existente es que esa confrontación es soterrada entre Almazán Cervantes y Molina López es revelado por los mismos elementos municipales, quienes solicitaron omitir su identidad, por temor a represalias, sin embargo sostienen que después de que fueron investigados ahora se sienten libres de toda responsabilidad de las acusaciones que les hacían algunas familias agraviadas. Pero no tienen libertad para ejercer sus funciones de vigilancia y seguridad, puesto que se les  ha delimitado para estar solamente en los cinco barrios, sopena de que si los sorprenden en alguna colonia o comunidad por los elementos de la “Fuerza Estatal” serán detenidos y encarcelados. Esta es una orden directa de Pedro Almazán Cervantes, se desconocen que intereses oscuros encierra, aunque especulan que podría estar coludido con la delincuencia organizada para que esta comete atrocidades en plena capital del estado y sin importar la hora del día, y con toda impunidad se desplaza por todos lados. Esto es aprovechado también por la marcada confrontación entre el Gobernador del estado, Héctor Antonio Astudillo Flores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el reinstalado alcalde priista Marco Antonio Leyva Mena, quien por cierto no ha dado la cara a los medios de comunicación que tanto lo halagaban, y ahora está convertido en un fantasma. Eso no abona en nada para la seguridad pública, por ello los elementos del Ejército mexicano, los policías federales y estatales se hacen de la vista gorda, porque también estaría divididos y estar al servicio de los grupos delincuenciales que están operando y disputándose la plaza de la capital del estado de Guerrero. Si no hay coordinación entre autoridades, tampoco lo habrá entre las corporaciones militares y policiacas, y quien saca la peor parte de toda esta descomposición es la ciudadanía, principalmente de inocentes entre niños y adultos. Como se recordará el 4 de enero hasta a finales de junio estuvieron acuartelados los 120 policías preventivos de Chilpancingo, nunca se informó oficialmente en que concluyó la indagatoria por la Fiscalía General del estado, ahora se les observa estar en las calles dando seguridad, pero de manera limitada. Tampoco se ha informado quien o quienes han dado la orden, sin embargo se conoce que los preventivos municipales, únicamente pueden hacer rondines de vigilancia  en los cinco barrios tradicionales de Chilpancingo, capital del estado de Guerrero.Ahora entendemos perfectamente porque no se les ve a los preventivos en las colonias populares haciendo sus recorridos como anteriormente, mucho menos prestando auxilio de la población, pues están acotados. Sin embargo la policía “Fuerza Estatal”, si se mete a las supuestas áreas delimitadas por Almazán Cervantes, por ejemplo ayer lunes como a las 14:30 horas, por lo menos siete patrullas conducidas alocadamente, y hasta pusieron en peligro a los transeúntes al circular en sentido contrario por la calle “Pedro Galeana” del fraccionamiento “Unidos por Guerrero” y la colonia Morelos, con el falso argumento de que merodeaba un grupo armado para atacar uno de los sitios de taxis y urvans que van a distintas localidades circunvecinas a Chilpancingo. En realidad se trató de una falsa alarma, pero eso si actuaron con prepotencia, y arbitrariamente que más de 15 elementos allanaron las instalaciones de “La Tiza” de dónde sacaron un joven que conducía una motocicleta, y después de demostrarles que no traía consigo nada, lo dejaron en libertad. Mientras tanto innecesariamente  desplazaron a más de 30 elementos a bordo de 7 patrullas, gastando gasolina, neumáticos y por supuesto el salario que gana cada uno de ellos. Con este tipo de show tratan de justificar para andar en la calle sin que estén combatiendo y abatiendo a la delincuencia del crimen organizado. Los elementos de la policía “Fuerza Estatal” tuvieron un comportamiento de abuso de poder contra los pocos periodistas que llegaron a cubrir la información, no les permitieron el acceso, les exigieron credencial del medio y en todo momento empuñando sus armas largas. Esa movilización aparatosa  de la “Fuerza Estatal” fue inútil como si fueran a detener a un capo de la mafia, muchos de ellos embozados como verdaderos delincuentes, pues ya habían registrado al joven motociclista, y todavía otro elemento, se le acercó con su pasamontañas y lo sometió a la “bascula” con todo el abuso policial. En esta intervención nunca se observó a ningún elemento de la Policía Preventiva, ni del ejército mexicano, mucho menos de la policía federal. Entonces se confirma que no existe coordinación entre los tres órdenes de Gobierno para ofrecer vigilancia y seguridad a los habitantes de Chilpancingo. Definitivamente existe esa confrontación silenciosa  entre los jefes policiacos municipal, Paulino Molina López y el estatal, Pedro Almazán Cervantes, quien ya debería ser relevado del cargo, porque le está haciendo mucho daño a Guerrero y a los ciudadanos de Chilpancingo. Ya va siendo hora que el Gobernador del estado, el priista Héctor Antonio Astudillo Flores, lo vaya dejando sin empleo, porque ya le viene un problemón, que tendrá que pagar salarios caídos y la reinstalación de cerca de 180 policías estatales despedidos hace 14 meses, solo por caprichos de Almazán Cervantes, con la supuesta argumentación de que habían desacatado al alto mando, cuando en realidad exigían mejoras laborales y trato digno. Ahora un juez federal está ordenando al gobierno de Guerrero el pago de salarios caídos de 14 meses y la reinstalación, esto se lo tiene que agradecer Astudillo Flores a su actual y cuestionado secretario de Seguridad Pública del estado. Por esa confrontación entre los dos jefes policiacos,  perfectamente la aprovecha la delincuencia organizada para cometer impunes ataques en pleno centro de Chilpancingo y a la luz del día, sin que hasta el momento hayan sido detenidos los responsables. Pareciera que Almazán Cervantes tiene tratos con los delincuentes que operan en la capital del estado, cuando se supone que debería haber una coordinación con la municipal, todo enmarcado en al artículo 115 constitucional, en la que no debe haber subordinación, sino hacer un trabajo institucional. Entonces el ciudadano tiene que entender de la existencia de la confrontación, por lo tanto el crimen organizado no tendrá ningún problema, porque cuenta con el permiso no escrito, pero se entiende que existe valores entendidos. Desde que la policía estatal se hizo cargo de la seguridad de la capital por casi seis meses, tras el acuartelamiento de preventivos, no habido detenidos por algún hecho delincuencial que haya ocurrido en alguna parte de Chilpancingo. No va a suceder porque hay entendimientos soterrados entre Almazán Cervantes y la delincuencia para que éstos no sean molestados, o simplemente llegar tarde a cualquier escena de hechos violentos en la que su trabajo se reduce a tomar fotos, notas y resguardar el área, pero nunca persiguen a los facinerosos. No es ningún invento, ahí están los resultados de todos los acontecimientos delictivos que han sucedido en las últimas horas, en que se dieron en una sola semana hasta tres ataques armados en Chilpancingo, en donde tienen sus bases de ascenso y descenso las urvans “Morelos” de Chilapa de Alvarez y Chichihualco. Estos hechos se dieron el lunes 23, viernes 27 en Chilpancingo, en la que los agraviados son del sitio “Morelos” de Chilapa de Alvarez y domingo 29 de julio, en el sitio de las urvans que van a Chichihualco, en la que las evidencias quedan claras de que no hay intervención de los tres niveles órdenes de gobierno para garantizar seguridad a los ciudadanos que se dedican a trabajar con honestidad. Por los tres ataques se cuantifican cinco muertos dos choferes de urvans de Chilapa de Alvarez y tres usuarios de la ruta a Chichihualco, cuatro urvans dañadas, de las cuales dos incendiadas y al menos tres personas heridas. De todo esto, el Gobierno estatal y municipal, no han dicho nada, total silencio de complicidad por esas atrocidades cometidas por la delincuencia organizada y seguirá actuando con toda impunidad en Chilpancingo, capital del estado de Guerrero en donde tienen “permiso” para “trabajar” sin que sean molestados. En tanto la policía estatal es desviada para ofrecer seguridad al gobernador del estado, en los lugares en donde encabeza eventos en donde trata de lucir su imagen. Por ejemplo, hoy martes por la mañana, había patrullas y elementos de “Fuerza Estatal” en amplio cinturón de seguridad en las inmediaciones y entrada de la Universidad Policial (UNIPOL) que se ubica al norte de Chilpancingo. No hay duda que la policía estatal es utilizada para cuidar al mandatario, y se olvidan de la seguridad de los ciudadanos quienes pagan sus impuestos puntualmente y que se sopone es su prioridad  del gobierno en sus tres niveles. Pero ya quedó demostrado que las fuerzas de seguridad están para otra cosa, menos para defender y salvaguarda a la sociedad. El escenario es tétrico.…¿Cjng?...Inicialmente circuló vía WhatsApp y después en las redes sociales, un video de supuestos integrantes del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en una caravana por la sierra del estado de Nayarit. La persona que captó el video camina por más de dos minutos junto a la caravana y va mostrando el poderío de los presuntos miembros del CJNG, mientras los hombres lo saludan y sonríen a la cámara.   Puro Cartel Jalisco”, dice uno de los hombres. “¡Aquí nomás patrullando!” Algunos portan uniformes tipo militar, usan chaleco antibalas y están cubiertos del rostro. Otros caminan sin preocuparse por cubrirse la cara con los pasamontañas. El video se ha compartido más de mil veces y cuenta con 70 mil reproducciones. Durante 2 minutos con 12 segundos, se observan cerca de 20 vehículos detenidos sobre un tramo carretero y más de 70 hombres que portan armas de grueso calibre. La persona que graba camina mientras va capturando los vehículos de donde han descendido los hombres, quienes saludan y sonríen. “CJNG” son las letras que exhiben algunos de los hombres en la parte posterior de sus playeras negras. Al respecto autoridades de Jalisco dieron a conocer que la Policía Cibernética analiza la autenticidad del video y dónde fue filmado. Esta es una muestra de que la delincuencia se pasea con toda impunidad y el gobierno federal, bien gracias, y más ahora que ya está en el proceso de terminación del sexenio. Si es real o ficción lo del video,  esos supuestos integrantes del cártel, la verdad que traen mejores carros y armamento que cualquier corporación policial o militar.  Nadie sabe, ni los ha visto en caravana, eso queda en evidencia de que el Gobierno en sus tres niveles están coludidos y les brindan protección, porque si hubiera seguridad, estos hombres no estarían presumiendo su poderío. Además hoy en día se cuenta con toda la tecnología del mundo como para justificarse el Gobierno que es difícil localizarlos. Falso, falso, falso.…Investigación…Mientras no haya sido declarado presidente electo, hasta hoy solo como ganador de la contienda constitucional, en su casa del virtual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, está recibiendo visitas en la colonia Roma, contingentes de personas o algunas gentes solas, de todo el país, en la que le piden, y en otros casos exigen. Además salen a relucir peticiones hasta se pudieran considerar fuera de la realidad. Un caso peculiar es la de un imitador de Pedro Infante, identificado como Cuco Leyva, pidió a Andrés Manuel López Obrador, virtual Presidente electo de México, que investigue la muerte del ícono de la Época de Oro del Cine Mexicano. El hombre aseguró que Infante no murió en el avionazo de 1957, sino en 2013. De acuerdo con su versión de los hechos, el cantante mexicano tuvo que esconderse porque un político andaba atrás de él. Leyva llevó un micrófono y una pancarta hasta las oficinas de López Obrador, en la colonia Roma, en la Ciudad de México; cantó y habló con medios de comunicación sobre la peculiar petición.  Infante murió en el municipio de Delicias, Chihuahua, en 2013 y su cuerpo fue sepultado en esas tierras, según el relato de Leyva.El hombre aseguró que Andrés Manuel López Obrador, quien recibió más de 30 millones de votos el 1 de julio, debe iniciar la investigación con una prueba de ADN. Leyva no pudo hablar con el tabasqueño, pero dijo que volverá.

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