jueves, 7 de marzo de 2019

ARTÍCULO

Los Tlacololeros
Edilberto Nava García
En Apango se visten Tlacololeros, originales y copiados, imitación, pues. Son varios años a que se visten Tlacololeros que se distinguen por sus sombreros cubiertos de aparente cempazúchitl, al estilo Chilpancingo. Se trata de la danza que trajo el paisano Cornelio Parra Ojeda. La ensaya muy bien y desde luego que luce. Empero, en Apango pervive la original, la muy nuestra que, como e
s de entenderse, es la que en realidad nos representa. Las máscaras son grandes y semejando al rostro de las personas que las usaban al danzar. El chirrión es más largo, con reata, lía y pajuela. Los Tlacololeros de Apango se golpean en la espalda con dicho chirrión, en tanto que sus sombreros son más gruesos y adornados con figurillas de palma, simulando flecos. Se calzan con huareches, no con botas, pero si usan chaparreras. Y es que hay de Tlacololeros a Tlacololeros, pues dependiendo de sus cosechas, es como se distinguen, Es decir, hay agricultores pobres y otros menos pobres. En cambio los danzantes de Chilpancingo, con chirrión más corto, se golpeaban en el hombro, adornan sus sombreros con flores de tapayola y su calzado es botín. Lo único raro en la danza copiada aquí, la de Chilpancingo, es que existan máscaras negras, pues la danza es de origen prehispánico, es decir, desde antes de la llegada de los conquistadores españoles, quienes décadas después, trajeron esclavos negros. El término tlacololero es un hibridismo de náhuatl y castellano. En náhuatl, el plural es tlacololme, en tanto que en castellano vulgar se añade el sufijo lero, como en tlapalero, tlacualero, u otras como en fabriquero, tlahuanquero, etc. ¡Salud!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.