COLUMNA

Sin Concesiones
Armando Patrón T. 

•Un fracaso la administración de Toño Gaspar
•Negocios sucios y robo al amparo del poder
Un auténtico fracaso resultó como alcalde el perredista y ex priista Antonio Gaspar Beltrán, quien ha sido incapaz de solucionar uno sólo de los problemas que aquejan a la capital, pero que si suma uno más al pretender concesionar el servicio de recolección de basura a una empresa ligada con el ex alcalde de Acapulco, el tristemente célebre, Evodio Velázquez Aguirre, quien también maneja el dinero de las arcas municipales por medio de una de sus achichincles de nombre Gurí Carm

en Zuluaga Huerta.
El cristiano renacido que despacha como alcalde municipal, que utilizó a las sectas cristianas para poder llegar al poder, que engañó a miles de personas de las comunidades de la sierra de Chilpancingo, con una tarjeta que decía que obtendrían salario mínimo universal, ha dejado que la ciudad se bañe en sangre, que un grupo de sátrapas de priistas, perredistas y panistas desgobierne el municipio.
Antonio Gaspar Beltrán, resultó peor que Marco Antonio Leyva Mena, la única diferencia es que a Toño Gaspar lo apoya el gobernador del estado a cambio de privatizar los servicios públicos, mientras que al MAL, lo presionó y obligó a pedir licencia el desgobernador de Guerrero.
La falta de agua en los hogares de Chilpancingo, no es porque haya escasez de agua en los centros de recolección, sino porque año tras año se ha utilizado esa estrategia para que puedan ahorrar y robarse miles de pesos, porque Toño Gaspar sigue expidiendo los recibos de agua sin que haya el vital líquido. La gente no votó para que le robaran, pero el cristiano renacido sigue robándole a la gente por medio de los recibos de agua, un agua que no llega a los hogares.
Año tras año, se da la escasez de agua en los hogares, pero ya nadie les cree, porque cada año siguen surgiendo nuevos asentamientos humanos, y el problema es el mismo. La recolección de basura sólo se realiza en el primer cuadro de la ciudad y en colonias cercanas a esta, mientras que las cientos de colonias populares no cuentan con ese servicio, gracias a que Toño Gaspar está más preocupado por continuar apropiándose del dinero público.
Hace unos mes empezaron con el cambio de tubería de agua en varias colonias de Chilpancingo, pero la finalidad ahora no es la de mejorar las condiciones del suministro de agua, o que haya o mínimo del vital líquido, sino que los inversionistas cuenten con las condiciones mínimas para poder agenciarse ese servicio público, es decir, Toño Gaspar y el gober pretenden privatizar el servicio de agua potable.
Son millones de pesos que pretende Antonio Gaspar por medio de la privatización de la basura a su principal financiador de su campaña. El ex alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre, un triste personaje que dejó en bancarrota al Puerto de Acapulco, y que ahora pretende llevarse el dinero de los capitalinos.