martes, 27 de julio de 2010

Columnas


Memorandum
Prácticamente ha pasado un año y medio de la actual administración municipal, por lo que hoy se puede hablar de los resultados que han ofrecido los diferentes servidores públicos. En lo particular, en éste periodo de tiempo, llama la atención el trabajo de la síndica procuradora, Socorro Mondragón Sosa, quien antes de andar pensando en promoverse para otros espacios públicos, viene realizando un trabajo institucional, cumpliendo a cabalidad con su responsabilidad y con el compromiso que tiene con los habitantes de la capital del estado.
Si hoy se le considera como una pieza clave del gobierno municipal y brazo derecho del alcalde capitalino, no es porque ande en las colonias y comunidades promoviendo su imagen o buscando salir en las fotos como hacen otros, sino por su trabajo institucional, en donde siempre van por delante los intereses de Chilpancingo.
Por sus hechos, es evidente que a la sindica de Chilpancingo la mueve su vocación de servicio. No la ambición personal. Por eso se le ve inmersa en los programas y acciones que realiza el Ayuntamiento. Ahí están como ejemplo, los programas de limpia de barrancas y descacharrización, en donde su participación es notable e importante. Sin olvidar que desde que arrancó la administración ha llevado un ritmo de trabajo dinámico. No ha habido espacio para el descanso y la relajación. Ha sido una servidora pública de tiempo completo.
A Socorro Mondragón Sosa se le ha visto a la altura de todas las circunstancias. Cuando hay que presidir alguna reunión, lo hace con eficiencia y calidad. Y cuando hay que emprender alguna campaña de trabajo social o comunitario, es la primera que se pone la camiseta y le entra con todo a la talacha. Tiene el nivel y la capacidad para la toma de decisiones porque es una mujer con preparación y experiencia, pero además si hay que «ponerse el overol» lo hace porque es una mujer de trabajo.
Ya lo hemos dicho. Es la primera ocasión que Chilpancingo cuenta con una sindica de nivel. Con trayectoria política y administrativa, pero sobretodo, con mucha vocación de servicio y compromiso social. Antes se negociaba el espacio y no se cuidaba que la mujer que llegara a la sindicatura contara, mínimamente, con experiencia y trayectoria.
Por eso los resultados fueron escasos. Hoy con Socorro Mondragón Sosa, podemos hablar de una mujer identificada con la gente. Conocedora de la problemática. Pero, sobre todo, comprometida con su municipio. Los resultados están a la vista de todos.
En virtud de su trabajo es evidente la buena comunicación y la excelente relación que tiene con el alcalde Héctor Antonio Astudillo Flores, lo que se ve reflejado en eventos y giras de trabajo. Y porque no decirlo, en los mismos boletines oficiales que fluyen del ayuntamiento, en donde se pondera la presencia de la síndica.
Pero eso no es fruto de la casualidad. Ya que Socorro Mondragón Sosa ha depositado su interés en respaldar a su jefe y amigo, el presidente municipal, a efecto de que le vaya bien al municipio.
Es palpable, que a Soco Mondragón Sosa le interesan primero los buenos resultados de la gestión municipal, antes de cualquier proyecto político personal, lo cual es plausible, si consideramos, que todos los integrantes del cabildo deberían tener como objetivo principal servir a Chilpancingo, antes de andar pensando en proyectarse.
La apuesta de la sindica parece muy clara, en el sentido de encabezar un trabajo institucional, entendiendo perfectamente, que la base del éxito de los políticos de hoy, está fincado en los resultados. Esa es la cuestión.
Mensajes y comentarios: geruanoc@hotmail.com

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