martes, 8 de julio de 2014

ARTICULO

AAR: Tiempos difíciles


“Todo proceso de transición inicia con incertidumbre”.Leonardo Morlino. 


Efraín Flores Maldonado.

 En Guerrero la transición política se inicia con la derrota del PRI en 2005 y la toma del poder estatal a manos del PRD con Carlos Zeferino Torreblanca Galindo como gobernador. El gobierno que representó el ex-presidente de Acapulco, no siguió los pasos que marca en términos generales la Ciencia Política, que sugiere pasar de inmediato de una transición a la “instauración” de un nuevo régimen. Este régimen es un elemento complejo, integrado en primer lugar por la constitución, leyes secundarias, gobierno y partidos políticos. La transición dibuja la esperanza de un cambio de régimen, específicamente centrado en  cambios profundos en la constitución y leyes que instauren nuevos usos y  conductas de los representantes del nuevo poder público. Pero Torreblanca Galindo se sintió mejor aplicando la legislación del viejo régimen tricolor y en lugar de instaurar nuevos usos, mejoró los mismos, despidió 2000 mil empleados y la corrupción fue plena, cínica… e impune. Hubo transición democrática sin instauración. Así, el proceso democrático se estanco y empezó a dibujar una línea de posible retorno, en el   que  el viejo régimen tricolor retornaría al poder. Ello no fue posible, porque mas allá de la teoría política, el PRD con un poder estatal debilitado, sin fuerzas propias, optó por buscar ser colonizado por un representativo prestigiado y popular, producto genuino del PRI, que  no alcanzó la candidatura tricolor. Fue obra y maniobra anti-teórica pero posible en la praxis política la aceptación en el PRD de la candidatura de Angel Heladio Aguirre Rivero. El aspirante por primera vez en la historia de Guerrero, fue vértice que congregó en su apoyo a la mayoría de las fuerzas partidistas de izquierda…y de la derecha representada por el PAN. El PRI con Manuel Añorve Baños, obtuvo una votación abundante pero inferior a la de Aguirre Rivero. Parecía que ahora sí, la transición empezaría; Esta sin embargo, llega tarde, pues se inicia un año antes de que  finalice su periodo de gobierno. Ya no le queda tiempo. Aguirre Rivero está escribiendo las últimas páginas de su historia política. Su apuesta debe ser no mirar atrás, sino caminar con la vista puesta en su cercano horizonte que marca el fin de su camino en el sur. Más que construir nuevos  aciertos, Aguirre Rivero debe evitar cometer nuevos  errores. Tiene méritos, sin duda. Le tocó gobernar en tiempos difíciles para el País y de extremos sociales y políticos en Guerrero. Mantener la estabilidad y la gobernanza con un gabinete inexperto y mediocre, es la joya de la corona, es su mayor mérito político. Mantener una imagen personal y de eficacia teniendo encima decenas de parientes depredadores e inútiles es otro gran mérito. Aguirre ya no tiene tiempo para nuevos proyectos políticos. Su mirada debe llevarlo a la hechura de cuentas críticas de su gobierno y a  no permitir que sus aduladores lo ubiquen en un círculo mortal de cuentas alegres. Privilegiar la construcción de su puente de plata, para caminar tranquilo al final de su régimen. Ya no podrá dejar sucesor como tampoco pudo Torreblanca Galindo; Así podría quizá salir mejor librado en sus relaciones con el PRD, absteniéndose de impulsar candidaturas a diputados y presidentes municipales. Aguirre Rivero debe ser prudente a partir de una visión política profesional y estoy seguro que sabrá calcular sus alcances… y sus límites como gobernante que llega al final de su mandato. Ya tendrá tiempo, fuera del poder para constatar quienes fueron en realidad sus amigos, sus leales y quienes también le fallaron… y lo traicionaron. En estos momentos Aguirre Rivero tiene oxigeno político, pero no debe malgastarlo apadrinando candidaturas de ningún tipo. Solo hay 2 que bien debe procurar: la de su hijo Ángel Aguirre Herrera, que es un joven inteligente y prudente  y la de su esposa Laura del Rocío Herrera de Aguirre  que podría legítimamente ser postulada  y electa diputada local o federal. La Señora tiene un buen trabajo social en el Estado y ganaría limpiamente una elección por el partido político de izquierda que la postulara. Aguirre Rivero será bien recordado porque mantuvo la estabilidad política en tiempos difíciles.  Es todo. * Doctorante en Ciencia Política.

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