COLUMNA

RESQUICIO POLÍTICO

Hipólito Marbán

GOBERNACION MUNICIPAL:LA 

IMPROVIZACION, SU CARACTERISTICA

 Desde el gobierno del Medico Saúl Alarcón Abarca, el comandante de protección civil Misael Rubí Apreza, dio un pormenor de las condiciones que se encontraban las instalaciones de gas en el área de comida, augurando una posible desgracia humana de no atenderse a tiempo las instalaciones por una de cobre y no de manguera, han pasado varias administraciones dos con la de Mario Moreno

Arcos y el área de comida sigue instalada en mangueras de plásticos, donde diariamente infinidad de comensales acuden a ese lugar a degustar los platillos hechos como en casa, también Rubí Apreza, previno que el espacio era ya insuficiente para albergar la creciente demanda de comerciantes que se apostaban en las escaleras del mercado central, “Baltazar R. Leyva Mancilla” hecho en la época del profesor Alejandro Cervantes Delgado, por lo que sugería que peritos expertos en ingeniería de construcción, estudiaran las posibilidades de acrecentar el mercado con dos nuevos pisos e invitaba a que gobernación municipal el lado fuerte del ayuntamiento, crear un padrón del comercio ambulante y evitar su proliferación, afectando a los que si pagaban impuestos, al que por cierto el informe pormenorizado del comandante Rubí Apreza, fue a dar al basurero y en el mejor de los casos al sótano del antiguo ayuntamiento, Moreno Arcos quien relevo a Alarcón Abarca, hizo caso omiso al informe o posiblemente ningún personal de su “eficiente” equipo le informo de lo que se debía hacer en el mercado central, y nada novedoso pasó, hoy por segunda ocasión y con algunos meses de que termine su segundo periodo de gobierno municipal, y con la posibilidad de que renuncie antes, en la búsqueda del ser el abanderado priista para la gubernatura del Estado, el mercado central luce apretado y con constantes quejas por parte de los locatarios de una infraestructura caduca, sin servicio de agua, con pasillos y escaleras totalmente invadidos por el comercio informal, excepto la ampliación de un poco de espacio para los automovilistas que supuestamente irán a comprar al mercado central, no nos hemos cansado de manifestar que la miopía y falto de visión por parte de quienes han tenido la oportunidad de ser secretarios de gobernación, no han podido regularizar y controlar el comercio informal, apenas unos meses la administración de Moreno Arcos por voz de su actual secretario de Gobernación un tal Daniel, manifestó tajantemente que ahora sí, el comercio sería reubicado, y en su caso sacados de los lugares prohibidos ante la ineptitud y tartamudez gubernamental, las masas se toman la justicia por sus propias manos, como es el caso de lo sucedido ayer en el mercado central, donde un grupo de comerciantes liderados por Juan Serrano Moreno, que ha hecho del mercado un grupillo de camaraderías a complacencia del gobierno municipal, golpearon a cinco comerciantes de ropa ambulantes pernoctados en la calle “Roberto Nájera”, sin que la gendarmería estatal hiciera algo al respecto, con saldo de dos personas con lesiones que ponen en riesgo su vida, si los que sufrieron los golpes, se buscan a un buen postulante podrán demandar al ayuntamiento, el pago de su mercancía, así como el pago de sus lesiones y estudios que salgan a causa de la brutal golpiza que les propino la banda de Juan Serrano Moreno, así como la reparación del daño por los posibles días de venta perdidos, por la simple razón que Isabel Gregorio Martínez y Manuel Martínez Gregorio y tres más lesionados, contaban con los recibos de pago que otorga gobernación municipal, así como el pago respectivo ante la oficina de administración del mercado “Baltazar R. Leyva Mancilla”, Moreno Arcos, no cuenta entre sus colaboradores a gente que sepa las funciones legales de un secretario de gobernación, y si ha puesto a improvisados y licenciados desconocedores de la materia administrativa legal, es necesario que el actual edil capitalino, pondere y esta vez sí estudie y tome en cuenta el informe que una vez entrego Rubí Apreza al cabildo de Alarcón Abarca, porque no queremos contar una historia trágica que se pudo haber corregido y prevenido… Veremos