POLICRÓNICA

    Llamada...“Ya nos ganaron, ahora será la próxima”, era la frase de consolación de la noche de la candidata a gobernador de la coalición PRD-PT, Beatriz Mojica Morga, al contendiente a la presidencia municipal de Chilpancingo, Antonio Gaspar Beltrán.

El domingo 7 de junio en Guerrero se desarrollaron las elecciones concurrentes, para elegir diputados federales, en lo local, el Congreso, diputados y presidentes municipales, en la que participaron 11 partidos  de los cuales, diez con registro nacional y uno estatal. De estos, quienes tenían más y mejores posibilidades las coaliciones Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Partido del Trabajo (PT) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Efectivamente entre este cuadrúpeda fuerza política fue la mayor disputa de cargos de elección popular, y finalmente la primera perdió la mayoría en diputaciones federales, el Congreso local y presidencias municipales, únicamente se está levantando con la de Acapulco,  pues en la madrugada de hoy jueves el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), le entregó la constancia de mayoría al perredista Evodio Velázquez Aguirre. Lo que finalmente no va a suceder, considerada la “joya de la corona” del PRI, Chilpancingo, capital del estado de Guerrero, en donde participó Antonio Gaspar Beltrán, perdió frente al catrín perfumado de Marco Antonio Leyva Mena, no porque tenga trabajo político, carisma o liderazgo, sino por el efecto “señor dinero” que compró conciencias y votos al por mayor. Aquel 1º de Mayo, día en que nadie labora por “Día del Trabajo”, tuvo la humildad de hacer una visita de cortesía a nuestra redacción, el candidato a presidente municipal de la coalición PRD-PT, Antonio Gaspar Beltrán y desde entonces no lo hemos visto ni saludado. En esa ocasión recordamos perfectamente que nuestros colegas de este equipo de investigaciones especiales lo alertó anticipadamente  que tenía dos fortalezas: trabajo social y de gestoría y que conoce a la perfección los principales problemas del municipio de Chilpancingo, por lo tanto si ganaba con mucha certeza lograría resolverlos y recordamos que nos comentó que el Ayuntamiento dejaría de ser el Palacio del Rey y desconcentraría la administración municipal en cuadrantes en el medio rural y urbano para que el pueblo ya no tuviera que desplazarse para buscar al presidente municipal  y los funcionarios.  Propuesta innovadora, porque cada día los problemas  del municipio son más intensos, difíciles de resolver y más con funcionarios huidizos. También se le anticipó que una de sus debilidades es que se estaba enfrentando  al poder económico y político del gobierno de la república, ya que a través de la Secretaría de Gobernación federal que encabeza Miguel Angel Osorio Chong, había mandado a Guerrero a operadores políticos y económicos, para lograr comprar todo lo que significara “triunfo”. Lo que finalmente se impuso en Chilpancingo y a nivel estatal, fue el “señor dinero”, y parece que eso no lo entendió perfectamente Antonio Gaspar Beltrán, se lo dejó a sus amigos que lo apoyaran con lo que pudieran y a su equipo de  trabajo, sin dinero, pues ésta contienda y las que vienen, jamás se van a ganar con discursos de saliva, si no “cuánto me das”. Era el momento para que Chilpancingo, experimentara una alternancia en el poder municipal, no se dio desgraciadamente por la intervención del “señor dinero” y las fuerzas oscuras con las que no se acepta ni siquiera de chiste un comentario. Gaspar Beltrán lo supo personalmente de la existencia de esos “amigos”, por ello sanamente y hasta políticamente ingenuo, prefirió poner su mejor esfuerzo porque vino tropezando de la adversidad dentro del PRD y sus tribus, primero para ganar la candidatura y luego competir, ya en el terreno de los hechos demostró que tienen capital político. Entonces en lugar de sentirse derrotado, es un ganador de la contienda electoral del 2015 porque hizo una buena campaña, enfrentando muchas carencias, pero enjundioso, y perdió la elección de presidente municipal. Eso lo supo después del mediodía del domingo 7 de junio, cuando en su casa de campaña recibía la información que los resultados no le eran favorable, pero también conoció como el equipo de trabajo, no de su contraparte Leyva Mena, sino del PRI-Guerrero y confabulado con el gobierno federal, estaba la desventaja muy marcada, pese a ello los resultados no son abismales. Entonces sostenemos que Antonio Gaspar Beltrán ganó la campaña y con propuestas innovadoras, pero no fueron suficientes, porque le faltó el respaldo del “señor dinero”. Esa noche del domingo “caliente” por los acontecimientos electorales, pero fría la realidad en medio de la lluvia, en “La Palapa” de la colonia Galeana, cuando Antonio Gaspar Beltrán trataba de dilucidar el resultado de la jornada electoral  acompañado con parte de su equipo de trabajo, entró una llamada a su teléfono celular de la candidata a gobernador de Guerrero la perredista Beatriz Mojica Morga, palabras más o menos, le externó: “Ya nos ganaron, ahora será la próxima”, pues ella tenía resultados de toda la entidad guerrerense. Invitaba al candidato a la alcaldía de la  capital del estado, aceptar la realidad y trabajar para las próximas elecciones. Ante esto, Gaspar Beltrán sintió que la tierra se lo tragaba y cambió de colores y miró a su equipo,  tras la breve conversación con “Bety”. Desde ese momento ya no se hizo nada, más que esperar y por lo tanto lo que por ley le corresponde,  ahora su gente protesta, exigió junto con la dirigencia del PRD, demandando a las autoridades electorales que se hiciera un recuento parcial de votos y se hizo en el distrito dos, en la que hubo 300 sufragios más para la coalición PRI-PVEM. Insistimos no fueron votos de voluntad ciudadana, sino comprados desde los 100, 200, 300, 500 y mil pesos, además de un desayuno o despensa. Es decir fueron cantidades descomunales de dinero que se repartieron en Chilpancingo, para que el PRI mantenga la supremacía de votos…Cuaunegocios…Luego de que el voto le ha favorecido al futbolista mexicano, Cuauhtémoc Blanco Bravo, se han soltado  verdaderas “Cuauversiones”, por un presunto “Cuaunegocios”, por un lado lo cuestionan de que es violento e ignorante, por el otro también se especula que por “motivos de salud”, renunciará el triunfo como presidente municipal electo de Cuernavaca, Morelos, pero lo más preocupante es que se habla de que su candidatura encierra un grotesco “business”,  y hasta un posible fraude. En estas últimas horas, no le han faltado más cuestionamientos, que felicitaciones para el “jorobado” de Blanco Bravo, vecino del barrio bravo de Tepito, Distrito Federal, y según avecindado en Cuernavaca. Bueno, sobre esto último, se comenta que atrás de todo este triunfo, hay un supernegocio de unos morelenses. Hay una historia negra que en los próximos días podría dar mucho de qué hablar y escribir. Se comienza a ventilar públicamente que en el estado de Morelos, hay un par de hermanos que son bien conocidos Julio y Roberto Yáñez Moreno, no muy buenas por cierto. Nunca fueron buenos estudiantes, carecen de título profesional, pues lo suyo lo suyo ha sido el “business”, y en ese aspecto han vendido prácticamente de todo. Probando en varias actividades comerciales llegaron a la conclusión de que no hay mejor negocio que tener un partido político, así que hace algunos años le arrebataron el Partido Social Demócrata a su fundador, Jesús Escamilla Casarrubias, y desde entonces lo manejan como si fuera una franquicia de cualquier marca comercial. En el 2012, aprovechando que tenían toda la infraestructura en cuestión de espectaculares y manejo mediático, y para que las prerrogativas quedaran “en familia”, decidieron postular como candidato a gobernador a Julio, el más chico, y como diputado plurinominal a Roberto, el mayor.  Como se puede ver los hermanos Yáñez Moreno, serán analfabetas, pero buenos para los billetes, por lo que se les ocurrió contratar a un personaje que les garantizara el triunfo en las urnas o un buen número de posiciones plurinominales. En medio de toda esta trama, los hermanos “business”,  conocieron a Moctezuma Serratos, miembro de una familia de futbolistas que logró llegar hasta la primera división profesional, y lo utilizaron como el enlace para contactar al ex seleccionado nacional Cuauhtémoc Blanco Bravo, y le ofrecieron la cantidad de seis millones de pesos ganara o perdiera, pero la idea era explotar la fama del hombres de las patadas. Los hermanos  Yáñez Moreno, como empresarios están acostumbrados a comprar y vender, a fin de recuperar lo invertido y obtener ganancias, por ejemplo, para ellos no es nada nuevo vender candidaturas, como se da en todos los partidos políticos. Los pagos se hacen en efectivo, en especie hasta con “cuerpomatic”. Lo novedoso de este asunto es que los Yáñez Moreno realizaron una especie de “subasta” con tres opciones: Uno:Las posiciones plurinominales tanto en el Congreso como en el Cabildo de Cuernavaca. Dos: Una candidatura uninominal a alguno de los diferentes distritos electorales locales, pero con el plus de que el futbolista lo acompañaría a los recorridos en las comunidades, garantizando así la presencia de cientos o miles de votantes en esos eventos. Tres:La posibilidad de ser favorecidos con contratos millonarios para obras en el Ayuntamiento que presida el futbolista Cuauhtémoc Blanco Bravo.  Antes de las elecciones los  hermanos “business” pusieron a disposición de los aspirantes a un cargo de elección popular en estado de Morelos, la cuenta 020945509 del Banco IXE a nombre de Roberto Yañez Moreno para que ahí depositaran o transfieran desde uno hasta 10 millones de pesos según fuera el cargo que pretendieran, obviamente que el dinero no se sabe si sería de procedencia licita o ilícita. En este trama de los negocios de los hermanos Yáñez Moreno, hay un contrato de arrendamiento que presentó Cuauhtémoc Blanco Bravo ante el Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (IMPEPAC),  resulta que es apócrifo y con este tramitó su carta de residencia en el Ayuntamiento de Cuernavaca y su cambio de domicilio ante el INE. De hecho, la casa ubicada en la calle Cocoyoc número 138 de la colonia Lomas de Cortés de Cuernavaca, capital del estado de Morelos, muestra claras evidencias de que tiene mucho tiempo que no ha sido habitada, lo que fue confirmado por vecinos. Hábiles en el manejo mediático, los Yáñez Moreno instruyeron a su entonces candidato para que se hiciera la víctima en cuanto la prensa lo cuestionara como el caso. “¿Te pagaron para preguntarme eso verdad?”, le espetó el futbolista al reportero del periódico Reforma, Héctor González, cuando éste le interrogó acerca de la casa de Lomas de Cortés. Con una carrera futbolística prácticamente acabada (en la que ha tenido que aparecer en novelas y anunciar cuanto producto le proponen), “El Cuau” ofrece una imagen denigrante cada vez que hace apariciones públicas en Cuernavaca: es como un animal de circo que obedece ciegamente a sus dueños, los Yáñez Moreno, quienes le indican cuándo dar entrevistas, cuándo tomarse fotos y cuando emprender la huida. No puede echarse para atrás porque ya aceptó una primera parte del pago y si se raja debe “devolver la copa”, como se dice vulgarmente. Y el riesgo es que alguno de los que participaron en esta triquiñuela, de los que conocen cómo se fraguó el posible fraude, quede a disgusto y entonces saque a la luz pública todos los detalles. Entonces sí, al Cuau y a los Yáñez Moreno se les puede caer la casa. Entonces seguramente sus “manager”, es posible que hayan inventado de que está enfermo y que fue hospitalizado, esperando la forma de cómo salir de este enrollo, porque nunca pensaron que ganaría la presidencia municipal, más como una aventura comercial y resultó que le pegaron a la lotería sin comprar un “cachito”. Esto pronto se conocerá el desenlace  de la telenovela futbolera, mezclada con la cochina política. Por lo pronto, “Cuaunegocios” resultó todo un éxito…Transparencia...Ahora la  Secretaría de Gobernación federal (Segob) deberá transparentar los acuerdos firmados con los maestros integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Esta es una resolución  de este miércoles por el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (INAI). El pleno  ordenó a la dependencia federal revelar la minuta acordada en una reunión privada con representantes de la Sección 22 de la CNTE, de Oaxaca, realizada el 9 de febrero pasado. Es un acierto del INAI, a fin de que los mexicanos conozcamos como el gobierno federal utiliza los impuestos de todos para beneficiar a los que están en la calle manifestándose con  o sin justificación. Es un avance importante para la transparencia  de este país, pues ahora mismos los miembros de la CNTE se están manifestando en el Distrito Federal, luego de que ayer fracasaran las mesas de negociación y en la que salió a relucir el condicionamiento de parte de la Secretaría de Gobernación, de que se negociará con los maestros disidentes hasta que retornen a las aulas escolares.