COLUMNA

El Grillito Sin Censuras

Alfonso Cerdenares Domínguez

 -.¡¡¡Infernal, macabramente, infernal‼! -.¿Desaparecen el IMSSS y el ISSSTE? -.¿Qué pasará con los créditos del FOVISSSTE y del ISSSPEG? -.¿Y los pensionados y jubilados?

¡¡¡Infernal, macabramente, infernal‼!; eso es lo que expresamos cuando nos hemos enterado de la misión que tiene el gobierno de la República, regenteado por el maquiavélico e ignorante presidente,

Enrique “Burrique” Peña Nieto, de acabar, no con la pobreza, sino con todos –o al menos la mayoría –de los pobres que poblamos toda nuestra nación, esto gracias a las reformas estructurales que tienen, como uno de sus objetivos, privatizar las dependencias de salud; es decir, instituciones como el IMSS y el ISSSTE, habrán de fusionarse para formar una sola, a la que pomposamente se le ha dado en llamar como Universalización de la Salud, en la que tendrá intervención plena la iniciativa privada; esto es, los grupos empresariales –como Mexicanos Primero –tendrán injerencia en materia sanitaria y harán un súper negocio, el cual habrán de matizar, considerando que son ellos quienes tienen y sostiene el mercado de medicamentos, de tal forma que controlan, no solamente la oferta y la demanda, sino las medicinas que los médicos a su servicio tienen que recetar a tal o cual paciente; lo peor de todo es que, con la desaparición del IMSS y del ISSSTE, quedarán en vilo muchas prestaciones, fundamentalmente las pensiones alimenticias, incluyendo los créditos hipotecarios del FOVISSSTE y del ISSSPEG, y, por tanto, los “beneficiarios”, a partir del 1º de agosto, ya no tendrán recursos para cubrir esa deuda; esto es, al desaparecer el ISSSTE, obviamente que desaparece el FOVISSSTE y el ISSSPEG, instituciones que presuntamente administraban los recursos obtenidos de las cuotas que los trabajadores en activo entregaban bajo el concepto de “Servicio médico y maternidad”, o como se llame ahora; es más, desde hace años, siempre se ha dicho que el ISSSTE y el ISSSPEG, prácticamente están en quiebra, por lo que desde entonces se pedía que desaparecieran; lo peor de todo es que, a través de esas dependencias y de los dineros que manejan, se cubren los salarios de los trabajadores ya jubilados y las pensiones correspondientes; a ello hay que añadirle los préstamos tradicionales, de hoja verde, roja y café, los cuales prácticamente han desaparecido; en fin, como dice el dicho: “El que es buey, hasta la coyunda lame” y tal parece que así estamos acostumbrados todos los mexicanos; veremos qué pasa, si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: alfcerdenaresd@hotmail.com