POLICRÓNICA

Encuestittis…Es normal conocer en el periodo electoral resultados engañosos de empresas encuestadoras que a estas alturas han perdido credibilidad, pero se siguen utilizando supuestamente para obtener una fotografía del momento para conocer posicionamientos de aspirantes a un cargo de elección popular.

En la fiebre de la encuestitis alguien las paga y normalmente es el beneficiario con los resultados, otros por curiosidad con la intención de saber quién pudiera en un momento dado representarlos en un proceso electoral complicado u holgado, más cuando existen muchos aspirantes al cargo de elección popular. La encuestitis desde nuestra óptica no arroja ningún resultado firme para tomar decisiones certeras, primero porque las empresas que hacen este trabajo de las consultas han perdido credibilidad en este país y en el estado de Guerrero. Sin embargo se siguen utilizando, pero con resultados que muchas de las veces no satisfacen quienes quisieran verse favorecidos. En este momento en Chilpancingo, existe incertidumbre por los que dirigen el Partido Revolucionario Institucional (PRI), por los resultados vergososos del gobierno municipal que ofrece Marco Antonio Leyva Mena, quien definitivamente está reprobado, y lo mínimo que le espera es que su partido lo relegue a la congeladora, aunque la mayoría de los ciudadanos agraviados quisieran verlo atrás de las rejas de un Centro de Reinserción Social (CERESO) porque en dos años ha sido un fraude de autoridad, ya que no hay obra pública, pero si ha mantenido una nómina de aviadores superior a los mil 700 que están saqueando el erario público municipal. Como se sabe, estamos a un mes y dos días de que inició la jornada electoral, luego de que iniciara oficialmente el pasado 8 de septiembre pasado y concluirá el 1º de julio del 2018. En este rejuego político serán 14 institutos con registro nacional y estatal, los que habrán de postular candidatos, pero de estos los más conocidos y con posibilidades de triunfo son por lo menos tres y mientras llega el momento para decidir quiénes son los abanderados, se siguen barajando nombres y más nombres, incluso muchos declaran que estarán en alguna boleta electoral para el proceso electoral del 2018, pero no ofrecen más información para que los ciudadanos conozcan sus verdaderas posibilidades de triunfo al cargo que buscarán. En las últimas horas ha trascendido de que el gobernador del estado, Héctor Antonio Astudillo Flores, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), ha ordenado hacer una encuesta para conocer que priistas están posicionados para relevar al fracasado presidente municipal de Chilpancingo, a quien le ha dado respiración artificial para ver si despierta  de su letargo, pero sigue igual de mula, porque niega la realidad de los acontecimientos. En el PRI se manejan muchos nombres, pero ha trascendido que en sus manos del mandatario tiene algunos resultados que le indican por ahora solo mantenerlos en la observación de aquí a diciembre cuando se tenga que decidir la candidatura a la alcaldía de la capital de Guerrero, que se ha convertido en un verdadero basurero a cielo abierto, gracias a Leyva Mena, por lo tanto es y será un foco de contaminación e infección, no solo para el medio ambiente, sino que afectará al PRI. Ante este escenario catastrófico, el preocupado es el gobernador del estado, poniendo el ejemplo, el estado de México, para el presidente Enrique Peña Nieto con la pasada elección, estaba obligado a retener el poder a como diera lugar, por dos razones, porque es originario de esa entidad y como mandatario nacional, se iba ver mal que perdiera la contienda de gobernador teniendo todo el poder político y económico del erario público y triunfo el 4 junio pasado. Entonces si lo vemos de esa manera, pero en “chiquito” es exactamente lo que va ocurrir en Chilpancingo, Astudillo Flores como es originario de aqui y siendo gobernador, le va a meter todo el poder político y económico para que el PRI retenga la presidencia municipal, aunque  el actual edil Leyva Mena sea el ser más despreciado de estas tierras de la capital del estado. Las evidencias nos llevan a esa conclusión, porque Astudillo Flores ya tiene un alcalde alterno para la solución de los problemas de la capital del estado y es su gente de todas las confianzas, Tulio Samuel Pérez Calvo, quien desde la semana pasada está operando con mucha cautela, y procura no aparecer en los medios para evitar especulaciones. El mandatario estatal puso a Pérez Calvo a operar para lograr en gran parte la solución de la crisis de la basura, misma que hasta hoy sigue minimizando Leyva Mena, que para él nunca fue un problema de ningún tipo,  mucho menos de salud, pese a que ya era ambiental y de salud pública, pero como es un cínico, no acepta que el gobierno estatal le está dando oxigeno político. Como Astudillo Flores está encabritado contra el alcalde por sus magros resultados y que no garantiza del todo un triunfo para que el PRI retenga la presidencia municipal de Chilpancingo en el 2018. Entonces el hombre fuerte para acordar todo tipo de acciones que tenga que ver con el gobierno forzosamente  Leyva Mena tiene que recurrir con Pérez Calvo, quien le habrá de resolver o negar todo tipo de respaldo, porque el jefe del ejecutivo no lo quiere tener cerca, porque está molesto con su MAL gobierno local. Por ahora el principal operador político del gobierno estatal en Chilpancingo, es el ex presidente municipal interino Tulio Samuel Pérez Calvo, quien conoce la problemática, por ello ha sido comisionado para medio levantar el cochinero en que tiene Leyva Mena a Chilpancingo. Mientras eso sucede, también Astudillo Flores está trabajando la otra vía para conocer quien pudiera ser el sucesor “idóneo” del MAL alcalde capitalino. Por ahora tiene en sus manos una primera encuesta espejo que de los muchos que se nombran en la escena política. En primer lugar como posible, se encuentra el empresario dulcero, Víctor Manuel Martínez Toledo, diputado del primer distrito, quien últimamente ha asumido el papel de mentiroso con sus representados, a todos los dice que si los ayudará, pero nunca llega esa respuesta y también desde que asumió la diputación, todo el tiempo se anda escondiendo de los ciudadanos y cuando lo logran aborda ofrece soluciones, pero con una sonrisa burlona que lo delata de que está jugando con las esperanzas de las personas y por supuesto la respuesta es un engaño kilómetrico y lo tenemos comprobado y si duda le damos elementos. Quienes conocen su actitud que ha asumido en los últimos tiempos,  podrían asegurar que  está perdiendo capital político, por lo tanto no garantiza que pudiera ser un buen presidente municipal, porque heredaría las mismas mentiras que se tienen con el actual fracasado Leyva Mena. Ese es el comentario que se tiene de los ciudadanos, inclusive se quejan que anteriormente cuando lo querían ver para saludarlo, para plantearle un problema y esperar una solución, con mucha facilidad se le localizaba en su negocio de la calle Morelos, pero ahora ya no lo encuentran, ni en su cubículo del Congreso y cuando llega aparecer, se hace el escurridizo y eso no le ayuda mucho para el proyecto político. Además debe saber Astudillo Flores que Martínez Toledo no está convencido al ciento por cierto de buscar la presidencia municipal, porque tiene en su haber muchas razones, entre ellas la familiar y es entendible, la inseguridad pública lo obligaría a desplazar a su familia de los negocios y hasta de Chilpancingo para evitar todo tipo de incidentes y eso le generaría problemas de inestabilidad en su núcleo familiar, ya no la tendría como ahora que convive con ella todos los días en el trabajo de los negocios particulares. En segundo lugar, figura Beatriz Vélez Núñez, actual secretaria general de la sección 36 del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salubridad, quien se ha mantenido en el cargo por dos periodos consecutivos. Pero por sus actitudes negativas con su gremio y los ciudadanos, no tiene todas consigo para lograr la candidatura, porque la acusan hasta de cacique, tanto que ya le llaman la “Elba Esther Gordillo de Chilpancingo”, además es represora de sus mismos compañeros, y precisamente en busca de sus aspiraciones políticas por la presidencia municipal de Chilpancingo, ha incurrido en excesos llegando al extremo hasta de amenazarlos con despedirlos del trabajo de la Secretaría de Salud si no la apoyan en su proyecto política para capital del estado de Guerrero. Entonces la diputada federal por el VII Distrito, con cabecera en Chilpancingo,  carece de consenso entre los ciudadanos, comenzando precisamente por su casa el sindicato, además de que se desconocen sus resultados y gestiones en favor de los ciudadanos, por ello existe duda que pudiera remontar y garantizar el triunfo del PRI para las elecciones del 1º de julio venidero. Ante los problemas sindicales y sociales prácticamente está en el abandono, en tanto su relación política con Astudillo Flores no es muy buena, tanto que no se le ve en los diversos actos cívicos y políticos como para que la anduviera  “placeando” para ayudarla en su proyecto, que ella si tiene muchas ganas de convertirse en la candidata, por ello asume actitudes de represión contra los que no coinciden, ni la respaldan en sus pretensiones. En tercer lugar se ubica a Ricardo Moreno Arcos, actual diputado local plurinominal, quien se ha valido del capital político con el que cuenta su hermano el dos veces presidente municipal de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos, quien por cierto ya declaró que se prepara para la contienda electoral del 2018, aunque no suelta prenda para que cargo. Mientras eso ocurre, en la encuestitis Ricardo aparece en las preferencias, pero sus antecedentes no son muy buenos como para confiar que sea el futuro candidato y después presidente municipal. Todo mundo sabe que fue un traidor del PRI, ya que lo abandonó cuando perdió la gubernatura con Angel Heladio Aguirre Rivero, postulado por el Partido de la Revolución Democrática y ahora regresó a la legislatura local, por segunda ocasión gracias  a su hermano Mario, quien negoció esa posición. Además se le cuestiona que cuando fue subsecretario de educación Guerrero, se le atribuye un saqueo de más de 400 millones de pesos, que a la fecha no ha solventado, sin embargo ha comprado muchos bienes muebles e inmuebles, el último que se conoce es la adquisición del hotel Muñiz, que está en el primer cuadro de Chilpancingo, contra esquina con el palacio municipal. Entonces es un ciudadano que no garantiza mucho, además sería cuestionado por sus antecedentes de traidor al PRI. En cuarto lugar, se encuentra Marcos César Armenta Adame, actual secretario particular del gobernador del estado, Héctor Antonio Astudillo Flores, entre su currículo nada más tiene de que en la anterior administración municipal fue síndico procurador en la administración de Mario Moreno Arcos, en donde pasó de noche. Ahora como secretario particular del mandatario, lo ha enviado a muchos eventos para que lo represente y de esa manera colocarlo en el escenario y en el último evento que estuvo fue precisamente ayer martes al conmemorarse el 34 aniversario de la fundación del Colegio de Bachilleres del estado de Guerrero y de esa manera sea visto como el posible candidato y que está en el ánimo del mandatario estatal, pero viene la decepción, que todo mundo va a buscarlo a su oficina del palacio de Gobierno, a algunos los atiende y les ofrece que será gestor ante el gobernador del estado para que los atienda en audiencia, pero nunca les dice la fecha y otros definitivamente no los recibe ni siquiera para saludarlos. Pero eso sí, en este momento carga un maletín cargado de “Diego Rivera”, “Zaragoza” y “Cuauhtémoc”. Cuando fue síndico procurador vivió en las tinieblas, nunca estaba en su oficina, nunca resolvió nada y ofreció siempre “hermano vamos a platicar”, pero nunca cumplió y ahora menos, pues se hace el importante, entonces con estas actitudes no llegará muy lejos, aunque esté en el mejor de los ánimos del mandatario, porque ha sido su fiel colaborador, pero eso no es garantía para los ciudadanos, porque su currículo es tan pobre, como si Leyva Mena bacheara una calle y en menos de que canta un gallo, se deslava y vuelve a quedar igual o peor el hoyanco,  es lo mismo que pasa con Armenta Adame, y eso no le ayuda para posicionarse políticamente y más cuando ya estamos encarrerados para la definición. Por ahora esos son los resultados de la encuestitis, y mientras llega el momento de la definición, esos cuatro habrán de estar siendo evaluados en su trabajo que realicen de hoy al mes de diciembre, inclusive se seguirán haciendo encuestas cada mes para conocer su evolución y resultados de estos cuatro, aunque no se descarta de que se pudieran incluir otros personajes más de la política priista. Por ahora la tendencia es de cuatro que están mejor posicionados, pero de aquí a diciembre, muchas cosas cambiarán, pero también los obligarán a redoblar su trabajo y esfuerzos por alcanzar esa posición, primero como candidato y segundo como presidente municipal, si es que son beneficiarios del voto popular. Mientras se está en la carrera de la definición del candidato del PRI a la presidencia municipal de la capital del estado de Guerrero, el actual fracasado y cuestionado alcalde, Marco Antonio Leyva Mena, está acotado por Pérez Calvo y se le prepara una fría congeladora, es decir, ya no tiene futuro político después de dos años de MAL gobierno y que va de MAL en peor. Es decir va a terminar en la basura, porque ese es el trabajo que ha forjado en los últimos meses, por ende merece la corona de oro como  “El Rey de la Basura Jefa”, tanto que hoy en día defiende a su secretario de Imagen Urbana, Carlos  Ramírez, hace el negocio con los desechos y es funcionario, en términos llanos y por ley, debiera renunciar al cargo y dedicarse a su negocio particular, porque en términos de ley, hay conflicto de intereses. Pese a todo ello Leyva Mena lo defiende, por ello es que se ha ganado el título de “El Rey de la Basura” porque tiene a su peón que le paga con el erario público y a la vez es comerciante de la basura. Esa es la realidad política y administrativa que se vive en Chilpancingo, capital del estado de Guerrero para las elecciones del 2018.…Despidos…Hablando de nefastos presidentes municipales, y casualmente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), ahora nos enteramos que el de Atoyac de Alvarez, región de la Costa Grande, está despidiendo trabajadores sin importar que los manda a las filas del desempleo y en plena jornada electoral, flaco favor le hace al Partido Revolucionario Institucional. Cuando faltan dos meses y medio para concluir el 2017, por lo menos 35 trabajadores ya fueron despedidos del Ayuntamiento municipal de Atoyac de Álvarez, región de la Costa Grande. El despido fue por realizar manifestaciones y denunciar que la nómina está detectado un grupo de “aviadores” que cobran en las arcas de la administración priista. Sin embargo no se dan por vencidos y continuarán manifestándose, pero en esta ocasión no tomarán instalaciones municipales, esto para no afectar a la ciudadanía, pero si acudirán a las instancias de la Junta de Conciliación y Arbitraje (JCyA) para interponer su denuncia a fin de que sea la encargada de la indemnización de los empleados despedidos. Actualmente la situación laboral por la que atraviesan los aproximadamente 35 empleados es de inconformidad, tras recibir la notificación del despido que ha hecho la administración priista que encabeza el alcalde Dámaso Pérez Organes, solo les determinó que sus despidos eran debido a las constantes manifestaciones por el atraso y adeudo en los pagos de sus quincenas, cuando es su legítimo derecho a recibir  puntualmente sus emolumento. Ante esta actitud los ahora desempleados tomaron la decisión de demandar a la administración de Pérez Organes ante las instancias de la JCyA, a fin de que por la instancia legal, actúe en contra del Ayuntamiento.  Mientras se espera la resolución de la autoridad laboral, los 35 despedidos están en espera del pago de los salarios, liquidación laboral así como de la parte proporcional del aguinaldo que les corresponde en base a la Ley Federal del Trabajo. Para que no se le olvide al nefasto alcalde, le recuerdan a Pérez Organes, “hoy somos priistas desempleados después de que llevamos al poder a  la gente que hoy está gobernando y  nos han dado una “patada”, pero  desgraciadamente  caímos en una provocación orquestada por los ediles que ordenaron el despido  de los empleados que mantuvimos el paro laboral durante un mes en la entrada del DIF municipal”. Existe la queja de los despedidos, que a pesar de los “cambios” que realizó el alcalde priista fueron para “simular” que fueron colocados en otras áreas, sin embargo “siguen teniendo el poder en tesorería, Recursos Humanos, entre otras”. Los empleados despedidos también evidenciaron que sostuvieron un roce y golpes con un número determinado de “aviadores” que cobran sin trabajar en las diferentes dependencias municipales. Ante esto, ahora los despedidos, están solicitando la intervención del gobernador del estado, el priista Héctor Antonio Astudillo Flores a fin de que interceda y evite este masivo despido, porque consideran que no es justo, solo por exigir un pago puntual, después de un trabajo realizado, ahora el alcalde responde con despidos, no obstante que los obligó a salir a la calle y hasta tomar instalaciones del Palacio Municipal de Atoyac de Alvarez para presionar al edil, pero reviró con represión, pese a que enfrenta diversas anomalías, además le piden al jefe del ejecutivo de que no meta las manos por el alcalde priista, “somos priistas, somos promotores de votos, seccionales, porque ese trato  nos están dando  los mismos priistas”. Ahí se avizora otra derrota del PRI, por un mal presidente municipal, es decir que los mismos alcaldes priistas se están encargado para que la derrota del partido sea estrepitosa en los comicios del 2018. Eso le beneficia a la oposición en todos lados y Atoyac de Alvarez no será la excepción.