martes, 1 de marzo de 2011

Nota


Humildad contrarresta
a la soberbia:Gaspar B.
El primer síndico del Ayuntamiento de Chilpancingo, Antonio Gaspar Beltrán, afirmó que la “soberbia” y “el menosprecio” se contrarrestan con “la humildad”.
En reunión con habitantes de diversas colonias populares de esta ciudad, Gaspar Beltrán definió que “la humildad” ayuda a mantener los pies en la tierra, porque mientras más alta sea la posición que tenga una persona está más expuesta a la adulación y a la envidia.
El primer síndico capitalino precisó que ser “humilde” no le resta autoridad a un superior, si no al contrario se da a respetar.
Sostuvo que las heridas, rechazos, incomprensiones, burlas, carencias y los miedos son vivencias que muchas veces nos orillan a crear una muralla alrededor de nosotros, en ocasiones estas vivencias son los motores que conducen a alguien a “tener mucho o a alcanzar una posición importante” porque el tener una autoestima baja necesita constantemente la aprobación de los demás.
Gaspar Beltrán cuestionó que el soberbio nunca acepta estar equivocado, pero además cree saberlo todo, mientras que el ser humilde no significa no desear cosas, porque de hecho difícilmente se puede tener algo “si no lo deseamos”.
Precisó que en el humilde no debe haber amargura ni resentimientos, porque en tiende a los demás y no juzga, porque sabe perdonar y pedir perdón.
Por ello afirmó que él disfruta sirviendo a los demás, admite que se equivoca, pone siempre atención a alguien cuando están conversando y que además ayuda a sus subalternos a terminar su trabajo, sin descartar que acepta y ofrece disculpas cuando alguien está en un error.