La Crónica, Vespertino de Chilpancingo

 Honorable Congreso de mi estado de Guerrero

Señores diputados locales de la  sexagésima legislatura

Compañeros alumnos

Público en general

Mi nombre es Edgar Eduardo Diego Ojéndiz

Soy alumno de la escuela primaria “Baltazar R. Leyva Mancilla” de la comunidad de Cajeles, municipio de Chilpancingo de los Bravo, Guerrero

Perteneciente a la zona escolar numero 24 del sector educativo  número 2

La oportunidad me trae ante ustedes para enmarcar históricamente el sacrificio de hombres ilustres que forjaron el inicio de una patria que hoy disfrutamos en todo su esplendor,   quien nos hubiera dicho que el estandarte del padre hidalgo se convertiría en el lienzo tricolor que  hoy cobija  la grandeza de nuestra patria, que la loza que llevaba a cuestas Juan Manuel de los Reyes mejor conocido como El Pipila, simulaba  el suelo fértil que hoy  día a día germina y fructifica en la conciencia de cada uno de los mexicanos.

No ha sido en vano la sangre derramada por todos aquellos hombres y mujeres que cansados por  la opresión que ejercía  la espada esclavizadora un día se lanzaron a la lucha por nuestra libertad,  el yugo que ceñía las sienes de los mexicanos no daba paso a los sueños de grandeza por que la esclavitud es el acto mas ruin que pueda practicar cualquier individuo o sociedad justificando  falsos progresos sociales que solo benefician a unos cuantos.

Aquellos hombres y mujeres talentosos ya dieron el primer paso,  ya abrieron las puertas hacia la libertad,   ya dejaron al descubierto un nuevo horizonte que ha de servir de camino para quienes quieran emprender el vuelo en busca de su propia libertad, pues esto  es solo el principio de una gran faena que le espera a quien quiera crecer en todos sus niveles de conciencia, pues se han roto las cadenas de la esclavitud física  pero ¿qué me dicen de la esclavitud  del pensamiento?  ¿qué me dicen de la esclavitud  del sentimiento? Que pacientemente aguardan a que llegue el nuevo hidalgo el nuevo Morelos que han de romper esas nuevas  cadenas que nos esclavizan a la ignorancia y a la maldad. 

No esperes  más. Pues nadie llegara a romper esas cadenas que te atan contigo mismo. Basta ya y convierte  este día en tu día de libertad  deja de ser esclavo,  despierta al padre hidalgo que llevas dentro y toma un estandarte que ha de ser tu mejor motivo para luchar y ganar batalla tras batalla hasta vencer la esclavitud de tu ignorancia, escucha la voz de tu conciencia que cansada esta del yugo esclavizador que tu le has puesto.  Ahora tu eres el amo que tiene atadas las alas de tu libertad,  y te sientes fuerte e invencible por que ese poder  lo tomas de  tus hábitos que anidan en tu propia comodidad.   Basta, basta ya:  lánzate a la lucha hoy, tu ejército serán  los libros ellos te ayudarán a planear las mejores estrategias de lucha para darle alas a tu conciencia  y volar, volar libre  a la conquista de las ciencias.    Sabemos muy bien que la unión hace la fuerza y si el abrazo de Acatempan  sirvió para unir dos ejércitos en una idea común, ¿por qué no se han de abrazar tus pensamientos con tus sentimientos en una sola idea?, la libertad.     Deja ya de ser esclavo de malos sentimientos que la escuela de la vida nos da clase gratuita día a día.   Detente y mira  que ya  no eres esclavo de nadie mas que de ti mismo. 

Despierta ya  y da el grito de tu propia libertad.    Hecha a vuelo tus campanas que anuncien que tus cadenas de esclavitud han caído,  deja que palpite libre tu corazón amando y respetando a tus hermanos. ¡vamos nuevos Hidalgos!    ¡vamos nuevos Morelos!  Vamos todos  a romper  esa nueva esclavitud.