martes, 9 de junio de 2015

COLUMNA

El Grillito Sin Censuras

Alfonso Cerdenares Domínguez


-.Ganó el PRI y perdió el pueblo. -.La venganza priísta viene fuerte. -.Ahora, ¿qué van a privatizar? -.Tenemos el gobierno que nos merecemos. -.El voto, mercancía para el mejor postor.

Finalmente, ganó el PRI y perdió el pueblo; de nueva cuenta se hizo notar toda la maquinaria priísta para, prácticamente, aplastar a sus adversarios políticos, sean de izquierda, ultraderecha o simplemente de derecha; claro está, utilizando sus viejas artimañas a las que nos tiene acostumbrados desde hace varias décadas: coacción y compra de votos, operación carrusel,
operación tamal y coerción de los votantes; de entrada, los guerrerenses sabíamos a lo que nos ateníamos si hacíamos el llamado a no votar, a cancelar o anular nuestro voto; el Partido “Robolucionario” Institucional, tan sólo con el voto dura, el voto comprometido, se alzaría con un triunfo “inobjetable, claro y contundente”; pobre de a gente de mi pueblo, pobre de los guerrerenses que entregaron su voto a cambio de míseras dádivas, por míseros 200, 300 ó 500 pesos, o por una despensa, un tinaco o una paca de lámina de cartón, pues ahora tendrán que aguantarse a lo que venga, pues la embestida, la venganza priísta viene fuerte, sin compasión; si antes del 7 de junio se les dificultó poner en marcha las leyes secundarias de las reformas estructurales, ahora se van a dar vuelo aprobando cuanto se les antoje y seguramente nos van a dejar en la calle a todos los mexicanos; ya nos privatizaron el agua, el petróleo, el gas, el teléfono; ¿qué sigue ahora?, ¿van a privatizar el aire que respiramos?, ¿a qué empresa se lo van a entregar?; definitivamente, el PRI se aprovechó de la necesidad de mi pueblo, del hambre de la gente que no reparó en el futuro, sino en la necesidad de calmar su hambre en esos momentos, por lo que aceptó ser cooptada, aceptó entregar el futuro de sus hijos, de sus nietos, de toda su descendencia a las manos de los maquiavélicos tricolores; en fin, gracias a todos los mexicanos agachones, santigüeños, persignados y rastreros tenemos el gobierno que nos merecemos, un gobierno entreguista, agachón y rastrero que se pone de tapete ante los poderosos; en lo futuro, pagaremos las consecuencias de nuestros actos, por no haber analizado concienzudamente nuestro voto que, dicho sea de paso, se ha convertido en mercancía barata en época de elecciones, el cual se vende al mejor postor; de todos modos, ahora ya ni llorar es bueno, pues a todos nos va a llevar la tiznada, sea del estrato social que sea; veremos qué pasa, si no, al tiempo y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: alfcerdenaresd@hotmail.com

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