miércoles, 14 de marzo de 2018

COLUMNA

COSMOS
Héctor CONTRERAS ORGANISTA
OTRA MIRADA
Obviamente que a mis más de 70 años de edad la forma de ver la vida y sobre todo la política de mi tierra Chilpancingo es diferente a la de los jóvenes y hombres maduros que también nacieron en este valle puesto tan de moda a lo largo y ancho de la república mexicana donde se nos conoce y se nos identifica ya no como “Ciudad Bravo”, sino como “El Callejón sangriento”, “La tierra de nadie” y “El Cementerio más activo del país”.
Por principio de cuentas, para que Chilpancingo como ciudad tranquila, tradicionalista y hospitalaria vuelva a ser la de antes, digamos la de hace treinta años o más años, ¿qué es lo que necesita?
No podemos decir que un cambio de mentalidad ciudadana. Esa vendría por ósmosis en cuanto tuviéramos encaramado en la silla municipal a un presidente municipal de confianza
y en quien confiar, en quien creer y quien con hechos nos convenza de que es eso, un buen alcalde y no un mandatario lengua larga, chismoso, mentiroso, falso y por consecuencia irresponsable, fantoche y que da palmaditas en la espalda a la gente y siempre anda mirando al horizonte sin mirar a los ojos a la gente y hablarles con la verdad. De esa clase cucarachas ya estamos hartos. Ya no queremos sonrisitas hipócritas. Chilpancingo necesita hechos de parte de gobernantes humanos.
El municipio de Chilpancingo está necesitando ¡ya! un gobierno municipal integrado por gente que sepa definir y valorar lo que es un ser humano.
Un presidente municipal pensante, creativo, dueño y dominador de iniciativas de alto nivel, no de soluciones cuadrilleras.
Urge un alcalde con visión de futuro, incansable en el quehacer político, que cuente con relaciones de alto nivel social, económico, político y hasta religioso y sea líder en gestoría y amigo y saludador entre la paisanada, sencillo, atento, educado, respetuoso, amable .
Que sea amistoso, de buen carácter, que conviva con el pueblo, que se baje de la banqueta para que lodo le salpique el casimir, que no salga del palacio municipal en camioneta blindada, sino caminando y conviviendo con la gente que gobierna; que no se rodee de guaruras, que vaya a cualquier parte sin miedo y sin previo aviso, que visite las comunidades todas que integran el municipio, las colonias y barrios de la capital para ver si ya puso la marrana…
Que se dé una vuelta por el mercado central y personalmente ponga orden ante la anarquía que invade los pasillos y que ordene que semanalmente se haga aseo general del centro de abastos y ponga orden en los estacionamientos…
Que refuerce la seguridad y que ordene que buena cantidad de personal y con unas pipas llenas de agua se encarguen de regar con agua abundante la apestosa plaza de estacionamiento debajo de donde está el letrero con el nombre de Baltazar R. Leyva Mancilla, porque ahí apesta a alcalde rata y a presidente municipal corrupto.
Que a la hora que quiera visite las oficinas de capach, de tránsito, la policía, el registro civil, gobernación y se dé cuenta de cómo se trata a la gente por parte de los “jefes” carotas de molcajete en esas “dependencias” que son las tradicionales ínsulas baratarias de algunos truhanes.
Y por amor a sí mismo, que no forme parte de esa mafita de “gallones” protectores de vendedores ambulantes en el centro y en las principales calles y andadores de la ciudad, con los cuales crea su escudo extra de poder, y que las calles se ocupen para caminar sin obstáculos y las familias puedan disfrutar de su plaza central y que ya retiren el “trenecito” que en cualquier chico rato puede causar un accidente.
Una necesidad súper urgente es saber con qué presupuesto cuenta el ayuntamiento y como usarlo de acuerdo a su programa de gobierno e informar a detalle al pueblo. Qué tipo de derrama económica se recibe del gobierno federal y a cuánto asciende el ingreso municipal. Cuánto es el egreso por pago de salarios e informar la verdad sobre muchos aviadores que se ha informado son los que tienen en bancarrota al ayuntamiento.
Síndicos y regidores podrían informar –junto con el presidente municipal- cómo se movió el erario mensualmente para que deje de expresarse la cantaleta de que “sólo vienen a robar”.
Debe ser muy interesante ser presidente municipal de Chilpancingo, algo histórico en la vida personal de los políticos, pero de un político que, por encima de todo le tenga amor a Chilpancingo y quiera trabajar para él.
Ya no necesitamos discursos, ni pleitos entre los que quieren ser y representan a equis o ye partido político. Chilpancingo necesita un presidente municipal confiable, humano, hacedor de ideas puestas en práctica para que nuestra ciudad logre alcanzar otros niveles y sobre todo, un verdadero orden y una paz genuina que nos devuelva la tranquilidad.
Ese que vaya a ser, que sea capaz de repetir la frase del creador del estado de Guerrero, el ilustre Don Juan Álvarez: “Pobre entré a la presidencia y pobre salí de ella”.
A ver quién le atora, ojalá y lo haya entre nosotros, porque desde aquí, de la redacción, no se ve ni se huele a alguien que tenga los espolones para ser presidente municipal. Disculpen, la expresión, pero a la vista solamente se ve a ¡Puro pájaro nalgón!, se les ven las ganas de “llegar” a la alcaldía pero para hacer lo mismo que los de ayer.
Ninguno de los que quieren, trae un programa de gobierno real… Puro delirium tremens

1 comentario:

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