CRÓNICAS DE AMOR

Crónicas de Amor

Felipe Zurita
Ingenuidad
Olvidando tu historia iniciaste la mía
tirando en la habitación el alias de señora
y prodigando el anhelo de tus deseos
la oscuridad que da el apetito por un beso.
 

Y es que tu cuerpo volvía a ser campo de flores
Ante la lluvia de mis besos que absorbías
en esa lujuria entre hombre y mujer
donde incluso no existe Dios solo placer.
 

Degastes caer al suelo los grilletes de tu juramento
el mismos que hiciste ante los hombres y ante Dios  
y es que cuando se termina el amor se termina Dios
se termina todo y se vuelve a renacer sin compromiso.
 

Hoy eres hermosa libre como el vuelo de una hoja
que se deja acoger por el viento y encontrar el gozo
en unos labios inocentes que se dejan atrapar
en la oscuridad de una habitación que no desea amar.