jueves, 27 de septiembre de 2018

ARTÍCULO

Tiempos y Realidades
Jorge Guzmán Martínez
Un acontecimiento inusitado es el que sucedió el día de martes en el puerto de Acapulco,  cuando en forma sorpresiva llegaron hasta las instalaciones de seguridad publica personal activo de la marina y otras corporaciones, el operativo causo estupor a propios y extraños, de tal manera que hasta un helicóptero sobrevolaba por la zona, pues nunca en la historia de ese turístico municipio había vivi
do tales consecuencias.
Como en todos los casos debe de resultar un presunto sospechoso, o presunto responsable a final de cuentas, y en este caso resulto premiado el capitán retirado de la marina Max Lorenzo Sedano Romano, recomendado quien sabe por quién (altos mandos de la federación), tomó las riendas de la cuestionada secretaría de seguridad pública del puerto.
Pero cual o cuales fueron los motivos para realizar esa operación acaso pesó mucho la denuncia de la alcaldesa electa Adela Román  Ocampo, en el sentido de que a la síndica Municipal, Leticia Castro Ortiz, la habían amenazado con darle un buen recibimiento a balazos si se presentaba a las mesas de entrega recepción de esa secretaria? O simplemente ya se acabaron las imposiciones y el nuevo gobierno municipal está tendiendo las barajas para que sepan cómo y de qué manera se va a trabajar.
Por otra parte se supo que la Sindica Actual habría publicado que lo de su supuestas amenazas solo habían sido rumores que dé a ver sido así hubiese realizado la denuncia ante las autoridades correspondientes y no ante los medios, lo que si supone es que están aprovechando lo de la supuesta amenaza para justificar un cuerpo de seguridad ostentoso y caro  para la alcaldesa, compromiso que había adquirido con el Gobernador Héctor Astudillo Flores, quien de las dos dirá la verdad con estas declaraciones quien de las dos quedará como mentirosa al final de este enredo.
Lo que si es cierto que a partir del 1 de octubre, se vislumbra un panorama diferente ahora esperemos que con esta limpia se mejore la situación social de Acapulco, ya que como trascendió que existía una presunta filtración del llamado crimen  organizado en las filas de la policía porteña, y en caso de ser cierta esta teoría la reacción de estas organizaciones no harán esperar o se destierran o se intensifican, las autoridades tendrán la última palabra.
Y hablando de limpias aquí en Chilpancingo no cantamos mal las rancheras, imagínese caro lector a unos días de que el MAL se vaya todavía hay incrédulos que piden que el señor alcalde  mande higienizar la pestilencia que prevalece en el mercado Baltazar R Leyva Mancilla, así como también la basura que a diario amontonan  en la calle se la lleve el camión recolector en tiempo y forma ya que siempre representa un foco de infección para la sociedad.
La basura siempre fue el talón de Aquiles del saliente alcalde gracias a los pleitos políticos la sociedad pagó y sigue pagando los platos rotos, queda claro que si se hubiese alineado a los juegos del hambre, no hubiera pasado nada  y puro orden y paz en su administración pero le ganó la soberbia y se puso contra sansón a las patadas, sin acatar la máxima de la jerarquía “las ordenes se hicieron para obedecerlas no para discutirlas” esperemos que los amigos de antaño  Héctor y Toño  en aquel entonces (uno Presidente municipal y otro síndico )  desempeñaron magníficos papeles en su equipo de trabajo. Ojala sigan en el mismo tenor, y  se logren con esto los propósitos que trae el joven presidente municipal electo cuando dice “porque nuestro compromiso es construir un gobierno diferente el gobierno de la gente”. suena chingón. Hasta la próxima.

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