martes, 18 de diciembre de 2018

ARTÍCULO

¿Qué es la filosofía? 
Apolinar Castrejón Marino
La filosofía es una actividad intelectual, para mentes muy evolucionadas, es decir, que no todas las personas pueden practicarla. Las personas que emprendan esta actividad, por principio de cuentas, deberán tener gran capacidad de abstracción y generalización.
También es condición indispensable, poseer una idea del mundo y de la vida, que sea completamente individual, inédita e irrepetible.
Antes de la era cristiana, Grecia era el polo de desarrollo de la cultura, y de ahí surgieron los grandes pensadores, los estadistas, los genios militares, y los artistas más admirables.
Se piensa que esos grandes hombres se motivaron, cuando entraron en contacto con las culturas egipcia, babilónica y mesopotámica, y posteriormente desarrollaron sus propias teorías, y funda
ron sus doctrinas de pensamiento.
En el siglo IV antes de nuestra era, no existían las escuelas como las conocemos en la actualidad, y la educación estaba reservada para los ricos, pues los sabios que se dedicaban a enseñar, cobraban grandes sumas de dinero.
Como es sabido, los primeros y más destacados filósofos de toda la historia de la humanidad fueron Sócrates, Platón y Aristóteles.
Pero tomaremos el caso de Tales para demostrar como es, y cómo surgió la filosofía. Era originario de Mileto, y durante sus observaciones e investigaciones encontró, que el agua es el elemento más abundante de la naturaleza, que circunda y sostiene las tierras conocidas.
Observó que en dondequiera que hay agua o humedad, hay vida, por lo cual estaba convencido que este elemento es la sustancia de la cual se originó la existencia. Tales pensaba que del gua derivan las sustancias, tanto aeriformes como sólidas, y que gracias a la condensación y rarefacción, se han formado todas las cosas que conocemos.
La figura más destacada y que es modelo del filósofo, es sin duda Sócrates. Este hombre era originario de Atenas, capital de Grecia, y se  dedicó a enseñar a los jóvenes en la plaza pública, a la cual llamaban  ágora. Impartía sus enseñanzas gratuitamente, a diferencia de los sofistas, que cobraban muy caro por enseñar.
Sus enseñanzas se sintetizan en el aforismo “Conócete a ti mismo”, por lo cual es considerado como el creador de la antropología filosófica.
Se sabe que viajó fuera de Atenas, únicamente cuando hizo su servicio militar. Sus estudios tienen como base al hombre y sus pensamientos,  y no se interesó por el estudio de ninguna de las ciencias naturales, pues aseguraba que los campos y los árboles, no tenían nada que enseñarle.
Su madre fue partera, y muy pobre, por lo cual él tuvo que educarse de manera empírica. Aunque se tiene la certeza de que ni siquiera sabía leer ni escribir, pero la brillantez de su talento le sirvió para ser un gran conversador y polemista.
Decía que la actividad de la filosofía consistía en “dar a luz” a las ideas, y le puso por nombre “paideia”, cuando no estaba en uso la palabra filosofía.
Su manejo de la dialéctica era impecable al discutir con sus adversarios: reunía y agrupaba frases discordantes, y luego se las devolvía en un orden diferente, ocasionando que cayeran en contradicciones.  
Sus enseñanzas eran demasiado libres y verdaderas, y en ocasiones eran tan directas, que llegaron a incomodar a algunos personajes públicos. Sus enemigos se confabularon para acusarlo de herejía, impiedad, y de corromper a los jóvenes. Fue condenado a la muerte, ingiriendo un poderoso veneno que se llamaba cicuta.
Sócrates murió, pero tuvo un discípulo muy fiel y aplicado, de nombre Aristócles, que llamaban Platón. Estudió con dedicación las enseñanzas de Sócrates, y cuando maduró física e intelectualmente, hizo varios libros en los cuales figuraba su maestro como protagonista.
Sus libros tienen la forma de una conversación, entre 2 o más personas discutiendo algún tema: “Laques o del valor”, “Lisis o de la amistad” “Fedón, o del alma”, “Filebo, o del placer”, etc. años después, los editores reunieron 35 libros en un compendio bajo el nombre de “Diálogos”.
Fue el primero a quien se le ocurrió formalizar la enseñanza, debido a la cantidad de seguidores que se reunían con él en los jardines del héroe Academo. Fundó una escuela a la cual llamó “Academia”, en donde impartía sus teorías, conocidas actualmente idealismo, debido a que considera que, lo único real son las ideas.
El término “Academia” ha perdurado a lo largo del tiempo, y se aplica tanto a las escuelas en general, como a las materias que se imparten.
Platón afirmaba que existen dos mundos simultáneos, uno de los objetos que podemos percibir sensorialmente, y otro de objetos ideales, al que solo podemos acceder a través de la razón. Los entes sensibles son múltiples, temporales y mutables, y las ideas son únicas, eternas e inmutables.
Puede decirse que el mundo sensible es el que describió Heráclito, con su aforismo “No te bañas dos veces en el mismo rio”; mientras que el mundo de las ideas, es el que imaginó Parménides “Lo que es, el Ser, puede pensarse; lo que no es, el No-Ser, no puede pensarse”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.