Primera plana

Se reconoce que La Crónica

no viva del chayotazo :SBR

Tino Gatica.—El escritor regional, oriundo de Tixtla, Shervando Basilio Rodríguez reconoce el trabajo periodístico que se desarrolla en las páginas de La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, es muy derecho pues llama la atención encontrar medios informativos desprendidos del «chayotazo» lo cual los hace dignos porque demuestra que en México y el mundo existen pocos medios en los que se puede confiar en ellos.

De visita a las oficinas de la empresa Lináloe Impresos (que asimismo edita el semanario El Matutino de Guerrero) el escritor que tiene diversas obras escritas auspiciadas por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), se mostró sorprendido de la sencillez de sus anfitriones así como del sitio en donde se elaboran estos dos impresos.

Confió en que el trabajo periodístico es de mucho riesgo, incluso pone como ejemplo que uno de sus hijos quiso estudiar periodismo, pero el abuelo lo hizo desistir. Dice: «Uno de mis hijos pensaba estudiar periodismo, pero mi padre me decía sabes qué Shervando (hijo) me preocupa, porque si no hace las cosas bien no vale la pena, pero si hace todo bien arriesga su vida.»

Y eso es lo que lo dijo un viejo de 90 años, tiene la razón de que ser honesto, y si hay una cosa más cara a pagarse, es la libertad, «por eso es más de admirarse y de respetar que no se detienen ante la adversidad y el peligro. Y hacen su trabajo como creen que debe ser un buen periodista.»

También, por lo que corresponde a los libros que ha editado, agradece y reconoce el auspicio del SNTE, pues desde que empezó a hacer sus poesías, el apoyo que tiene es que «quiero ser preciso, al SNTE pero a ninguna expresión, ni liderazgo, ni dirigentes.» Es la editorial del magisterio, que se intitula Benito Juárez García.

Algunos de sus libros, comenta en la visita a esta empresa periodística, «tengo una antología que se llama El Lado profano de la poesía, que es un tomo en donde viene casi todo mi trabajo en verso; el otro es Lo que el viento me dejó, que son mis vivencias y carencias que tuve como joven, con todo y limitaciones; el otro se llama El Cazador de los sueños perdidos que narra mis vivencias en Cuba y; El Aullido del Perro Callejero».

Finalmente, cabe añadir que se considera un escritor marginal , incluso desde su natal Tixtla, en donde todos los alcaldes y alcadesas son falsos, además de que para ellos «soy el hijo no deseado en el municipio, pero lo sigo queriendo mucho y no lo cambiaria ni por New York, tampoco cambiaría ese producto delicioso que es la cebolla, máxime que se conoce como el viagra tixlteco.»