miércoles, 18 de agosto de 2010

Columnas

La Capital
RAUL HERNÁNDEZ, LIBERTAD O PRISIÓN DEFINITIVA
Son días muy difíciles, hay que reconocerlo para Raúl Hernández Abundio preso político en el penal de Ayutla de los Libres, quien está siendo acusado presuntamente por el homicidio de un informante del ejército. Pero la tensión crece para él y su familia, ya que este asunto ha logrado atraer la atención de los organismos internacionales defensores de los derechos humanos.
El 20 de agosto, puede ser el viernes negro o todo lo contrario, según la resolución que emita el titular del Juzgado Mixto de Primera Instancia del distrito Judicial de Allende Alfredo Sánchez Sánchez, quien habrá de dictaminar si es sentenciado el defensor de los derechos humanos a cincuenta años de cárcel y que sería prácticamente una cadena perpetua, o bien pudiera declararse su total libertad.
Todo va a depender de las pruebas que se hayan aportados, ya que se conoció de manera extraoficial que hubo dos testigos oculares que lo involucran y señalan de haber disparado en contra del informante del ejercito mexicano.
El caso fue cerrado el 6 de agosto pasado y por presiones de los organismos defensores de los derechos humanos como Tlachinollan, la misma Comisión Interamericana de los Derechos Humanos y otros de los organismos que han fijado la mirada y exigen su liberación, se aplazó que este viernes habrá por fin una sentencia que puede ser favorable o contraria.
Es aquí donde se tiene que ver si realmente la justicia es ciega y lenta pero segura, toda vez que se trata de la vida de un ser humano que pudiera estar muchos años bajo la sombra o quedar libre, aunque por otro lado es importante precisar que los familiares del informante asesinado desde luego que han estado de exigiendo justicia.
Después de haberse dado este anuncio de la sentencia, lo que no se vale es que actores políticos y hasta precandidatos a la gubernatura del estado, busquen colgarse de su figura o su desgracia como claros reflectores para atraer votos y hasta en visitadores se han convertido, cuando en otros tiempos que no había procesos internos por la gubernatura del estado, nadie se acordaba del preso de conciencia.
Pero además de eso a la clase política partidista, del partido que sea, nunca les ha interesado la situación de los defensores de los derechos humanos en el estado de Guerrero y de los presos políticos que sigue habiendo en todo el país, precisamente ahora ante la efervescencia política donde hay un PRI hecho pedazos y un PRD sin acuerdos, los precandidatos se muestren interesados en la vida de Raúl Hernández Abundio como si de veras les interesara esa situación. Pues de todo esto tendremos que esperar el día viernes para ver como se dan las cosas.

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