Columna

Apunte de lectura

LOS LIBROS JAMÁS LLEGAN SOLITOS A LOS NIÑOS.

En un ambiente de lectura pueden crecer los lectores como los hongos en un ambiente de humedad. Xabier Puente Docampo

Reconociendo que se está en pañales en la promoción de la lectura, y que falta más apoyo e impulso de este tema en los medios de comunicación, el escritor y narrador oral Gerardo Méndez Pinzón impartió este 27 y 28 de septiembre, a personal de la Coordinación Estatal del Programa Nacional de Lectura y Enlaces de nivel Preescolar e Indígena, el Taller «La Formación de animadores de lectura», como parte de la actualización y capacitación del maestro Acompañante y Asesores Técnicos Pedagógicos.

Gerardo Méndez sostiene, que los libros por sí solos –aunque se diga muy metafóricamente-, «es que los libros nos hacen viajar, es que con ellos llegamos a muchos lugares, lo cierto es que los libros JAMÁS llegan solitos a los niños, es el trabajo del maestro en ser mediador, en acercar los libros a los niños».

No es que el maestro está desprovisto de habilidades para leer en voz alta a los niños, lo que pasa que poco a poco, no sólo el maestro, sino todos los que deberíamos contribuir en tener una comunidad lectora, hemos caído en la apatía, aunado en que a veces, el maestro ni es un buen lector, y al no gustarle la lectura, es muy difícil que contagie.

La apatía no se genera en el salón; es un sistema que lo envuelve, de no apoyo, de no ayuda».

Toribio, Juan Juanetes, y los Misterios de la abuela, -libros de Gerardo Méndez- que andan y son leídos por los niños de todo el país, y que forman parte de las Bibliotecas Escolares y de Aula del PNL.