Opinión

Expulsar del PRI a los
verdaderos traidores
José Nava Mosso
La elección del pasado domingo 30 de enero, demostró que los traidores de los priistas fueron Rubén Figueroa Alcocer, Héctor Antonio Astudillo Flores, René Juárez Cisneros, Beatriz Paredes Rangel, Manlio Fabio Beltrones y otros paleros; al imponer a un candidato como Manuel Añorve Baños, al que no quería la gente.
Fue cierto lo que muchas veces pronunció con bombo y platillo el diputado local Marco Antonio Leyva Mena —que tenían tres cuartas partes de cuerpo en Casa Guerrero— pero los traidores optaron por poner a uno más chiquito que definitivamente no convenció a los guerrerenses.
Hoy los resultados hablan: Con la no postulación de Angel Heladio Aguirre Rivero; Rubén Figueroa Alcocer, Héctor Antonio Astudillo Flores, René Juárez Cisneros, Beatriz Paredes Rangel, Manlio Fabio Beltrones y otros como judas, fueron los que realmente traicionaron a la militancia priista y a la población que supo razonar y decidir su voto por la mejor opción.
A ellos los traidores, le falló el márketing político, la estrategia del dinero, la presentación de artistas, propaganda excesiva, la demagogia del candidato del PRI y otros trucos.
La gente de Guerrero orientó su voto sobre la trayectoria política de los dos candidatos, el trabajo que realizó Angel Heladio Aguirre Rivero cuando fungió como gobernador interino y el de Manuel Añorve Baños en la alcaldía de Acapulco.
La gente y muchos priistas sufragaron por el candidato ciudadano y no por los partidos políticos.
La historia ya está escrita: Los priistas deben de llamar a cuentas a los verdaderos traidores, ellos deben ser expulsados o presentar su renuncia: Astudillo Flores, Figueroa Alcocer, Juárez Cisneros y Vicario Castrejón y otros responsables por no escuchar el palpitar y el sentir de un pueblo; por no postular a Angel Heladio Aguirre Rivero —que hoy por hoy demostró ser la mejor opción y el gobernador electo de los guerrerenses.