lunes, 14 de marzo de 2011

Columnas

Opinión
Jesús Cayetano Norberto

Hoy el PRI necesita más
de Mario, que Mario del PRI

A la fecha no se puede olvidar el resultado catastrófico que obtuvo el Partido Revolucionario Institucional (PRI) el día 30 de enero del 2011, donde de forma consecutiva este instituto perdió la gubernatura en Guerrero a manos de su acérrimo rival el PRD.
Por salud del PRI, el día de la elección a las seis de la tarde, una vez conocidos los resultados, el dirigente estatal Efrén Leyva Acevedo, debió haber renunciado, tal como lo hiciera en su momento en el Distrito Federal el dirigente del PANAL, quien reconoció su derrota y dimitió al sueño guajiro de reestructurar su partido, al perder las elecciones.
Hoy el PRI tiene cuadros muy valiosos, hombres y mujeres de probada experiencia, políticos de tiempo completo, pero en este momento el panorama político arroja circunstancias especiales, que apuntan como persona idónea para dirigir al PRI en Guerrero al diputado federal Mario Moreno Arcos.
¿Porqué Mario Moreno Arcos?, porque tiene presencia local, estatal y nacional, cuenta con una estructura demasiado fortalecida, porque practica una comunicación incluyente trabajando no solo en tiempos electorales si no de forma permanente.
Como diputado federal ha trabajado cercano a los presidentes municipales Priistas, siendo la voz en el Congreso de la Unión de las demandas más apremiantes de los municipios de Guerrero.
Desde el tiempo en que ha estado inmerso en la política, su trabajo ha sido constante entregando acciones que le han permitido sumar, en vez de restar, respondiendo a las expectativas de la gente.
Es de sabios reconocer que en este momento el PRI necesita de un hombre con ideas nuevas, dinámico y productivo como es Mario Moreno Arcos, que a su llegada tendrá el reto de implantar un nuevo modelo de hacer política, tanto afuera como adentro, haciendo lo que no han sabido hacer los otros, seleccionar a los mejores cuadros en la estructura del PRI, así como a las personas que señalen los militantes y simpatizantes para los cargos de elección con mayores posibilidades de ganar.
Además, siendo dirigente estatal del PRI, Mario Moreno Arcos, podrá tender el puente del diálogo y concertación con el próximo mandatario Ángel Heladio Aguirre Rivero, por ser su amigo y haber trabajado juntos en busca de beneficios para Guerrero.
No tomar en cuenta a Mario Moreno Arcos para dirigir los destinos del PRI en Guerrero y lo orillen a tomar la decisión de abandonar las filas del Revolucionario Institucional, la catástrofe será mayor en las próximas elecciones de la esquina, porque significará la salida de miles de militantes y simpatizantes que conforman la estructura del contador.
Por ello, me atrevo afirmar que hoy más que nunca el PRI necesita mas de Mario Moreno Arcos, que Mario del PRI, porque su sangre, vendrá a darle vida a un PRI que conforme pasan los días no se le ve pies, ni cabeza. Comentarios y sugerencias: j_Cayetano_77@hotmail.com